- No existe la ciencia de la política, afirma académico de la Complutense

Actualmente se debe considerar decir adiós a la ciencia política, reconociendo que ésta no ex iste y crear nuevos modelos, señaló el Doctor Agapito Maestre, académico de la Universidad Complutense de Madrid, durante el III Coloquio Internacional de Filosofía Política Contemporánea, que lleva a cabo la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la BUAP.

“La cultura hispanoamericana ha tenido un único modelo totalitario, el platónico, en donde los gobiernos no hacen política, sin pensar en el aquí y ahora, y el poder está en cuestión”, planteó el académico.

En la conferencia “Una ciencia política para la democracia”, afirmó que también existen liderazgos cuestionados, ya que las políticas cambian y generan división en la sociedad, la cual plantea volver a la revolución.

Comentó que para programar un nuevo modelo político que radique en la imparcialidad, se deben superar ciertas ideologías, como el desconocimiento de la propia cultura y comprender otras para entender lo que sucede en el mundo. “Se debe revalorar la historia, lo que significa el saber quiénes somos y asumir las tradiciones, sin ellas difícilmente se entenderán otras”.

Indicó que “la Revolución Mexicana buscaba que toda la población accediera al voto y que existiera el antirreleccionismo, ideales que aún tienen que seguir vigentes”.

Para pensar en la democracia, “el poder debe ejercer el diálogo permanente de opiniones para el bien común de la sociedad, como consecuencia durante el proceso de construcción de una nación, se generará democracia y libertad”, dijo el Doctor Maestre.

Además de pensar históricamente desde una lengua, como una cultura en común con rasgos distintivos, por ejemplo la religión, donde la libertad será la esperanza rescatada de la fatalidad.

En el comentario a esta la ponencia, la Doctora Lourdes Rosas López, académica de la Universidad Popular Autónoma de Puebla, destacó que los estudiosos de la política deben considerar la muerte de la política que dirige las masas y el pensar que ellos son depositarios de la verdad, y recordar la importancia de la historia como un proceso largo que permite ver cómo se construyen las instituciones y si tienen retrocesos.

“El gran reto es observar que la sociedad es un mundo global, en el que la política está en movimiento y debe observarse, cuidando de que no se polarice, ya que no existe una sola manera de ver un problema para analizarlo y solucionarlo, de esta forma la nación enfrentará la violencia”, finalizó.