- Viernes, 17 Febrero 2012 00:24
- Sus acciones y omisiones impactaron negativamente en la vida de los mexicanos
- Quedó patente la falta de compromiso del Gobierno Federal con los mexicanos más vulnerables sólo ejerció 69.4 por ciento del presupuesto del Programa de Apoyo Alimentario.
-Diputados priistas promoverán una minuciosa revisión de todos los hallazgos a fin de dictaminar, en los próximos meses y con estricto apego a derecho, la citada Cuenta Pública.
-El despilfarro por los festejos del Bicentenario asciende cuando menos a 3 mil 751 millones de pesos.
Al igual que lo hiciera el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, el Delegado Presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en el Estado de Puebla, Fernando Morales Martínez, consideró que las condiciones sociales prevalecientes en México son sumamente preocupantes y desalentadoras, tal y como lo demuestran los resultados dados a conocer ayer por la Auditoría Superior de la Federación a través del Informe sobre la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública de 2010.
De igual forma, Morales Martínez coincidió en que el 2010 seguramente quedará en la memoria del país como el año de la ineficacia, el despilfarro y la deshonestidad del Gobierno Federal, siendo que debió haber pasado a la historia como una celebración de orgullo nacional por tratarse del Bicentenario Las principales conclusiones de la Auditoría demuestran que los costos para el país trascienden el mal uso de los impuestos de todos los mexicanos: las acciones y omisiones en el ejercicio de los recursos públicos no sólo mermaron la calidad de vida de amplios segmentos de la población, sino que en algunos casos tuvieron consecuencias fatales.
Al PRI le alarman e indignan temas como la negligencia en la supervisión de casas de juego, entre ellas el Casino Royale; donde lamentablemente se perdieron vidas. La Auditoría concluye que la Secretaría de Gobernación no supervisó adecuadamente a éste ni otros permisionarios de casas de juego, al no contar con mecanismos de verificación para tal efecto Otro caso es el de los hijos de las madres trabajadoras que continúan en riesgo, no obstante la tragedia del incendio en la Guardería ABC en junio de 2009, durante 2010 la totalidad de guarderías auditadas incumplió con la normatividad de seguridad y Protección Civil así como con la respectiva Norma Oficial Mexicana.
También quedó patente la falta de compromiso del Gobierno Federal con los mexicanos más vulnerables ya que sólo ejerció 69.4 por ciento del presupuesto del Programa de Apoyo Alimentario. Este subejercicio tuvo consecuencias inadmisibles e inmorales.
A lo largo de 10 meses, la Secretaría de Desarrollo Social no entregó los complementos nutricionales y la leche fortificada a niños en situación alimentaria crítica y en todo el año nunca se les entregó a mujeres embarazadas y en lactancia, lo que seguramente tendrá efectos negativos en su desarrollo y salud en el largo plazo. Todo indica que los festejos del Bicentenario se convirtieron en una fiesta de corrupción e ineficacia. El despilfarro en este rubro asciende, cuando menos, a 3 mil 751 millones de pesos.
Entre las tantas irregularidades detectadas por la Auditoría sobre este tema, destaca que las adjudicaciones se efectuaron de manera directa y sin sustento en su justificación. Se transfirieron millonarios recursos a TURISSSTE, sin que éste tuviera la capacidad ni las facultades para realizar los servicios. Todo esto demuestra que el Gobierno Federal tiene perdida la brújula, pues gasta mucho en lo superfluo y poco en lo indispensable. Para no rendir cuentas, se escondieron recursos en fideicomisos. Se transfirieron 16 mil 172 millones de pesos a Fideicomisos y Mandatos.
Este monto, equivalente a 6 veces los recursos del Programa de Estancias Infantiles para Apoyar a Madres Trabajadoras, será ejercido sin tener que dar explicación a la sociedad. Lo anterior, no obstante que el entonces candidato Felipe Calderón Hinojosa, hace 6 años, durante un debate, había sido tajante al señalar que iba a “manejar en caja de cristal el dinero del pueblo”, que en su gobierno no iba a “haber ni fideicomisos ocultos, ni cajas misteriosas”.
En conclusión, ante éstos y otros hechos revelados en el Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública de 2010, el Partido Revolucionario Institucional, a través de su bancada en la Cámara de Diputados, promoverá una minuciosa revisión de estos hallazgos a fin de dictaminar, en los próximos meses y con estricto apego a derecho, la citada Cuenta Pública.