- Jueves, 27 Octubre 2011 07:18
Mercado mundial de plantas medicinales genera más de 75, 000 millones de euros anuales
México, D.F. La herbolaria es una opción para diversificar la agricultura y aumentar la rentabilidad del campo así como para reducir el gasto de las familias en la compra de medicamentos, aseguró el legislador poblano, Alberto Jiménez Merino a l presentar el libro Herbolaria Mexicana en la H. Cámara de Diputados.
Indicó que las famili as invierten entre 19 y 40% de su ingreso en la compra de medicamentos y cada vez les cuesta más acceder a éstos. Por ello la medicina alternativa es una opción para reducir el gasto de medicamentos pero necesita de mayores apoyos para la formación de recursos humanos, infraestructura, equipo y mayor apoyo al fomento productivo.
“En Alemania, Francia y Estados Unidos, 40 de cada 100 personas utilizan plantas para el tratamiento de diversos padecimientos y México cuenta con 21 de las 23 especies más demandadas en el mercado internacional, destacando el Cuachalalate, Orégano, Hierbabuena, Nopal, Epazote, Flor de Jamaica y Albahaca, mismos que se encuentran en Puebla.”
Los principales destinos de la exportación de plantas medicinales mexicanas son Alemania con 54%, Estados Unidos 13%, España y Francia 13%, Japón, Portugal, Inglaterra, Holanda, Suiza e Italia el otro 15%, no obstante México importa 47 especies medicinales entre las que se encuentran el Té verde, Linaza, Romero, Arándano y Jengibre, procedentes de Egipto, China Guatemala, España, Brasil, India y Perú.
Destacó ante Diputados, investigadores del Colegio de Posgraduados e invitados, que este negocio reditúa una derrama económica de 75 mil millones de euros anuales, si tomamos en cuenta que Puebla cuenta con 435 plantas de las 500 utilizadas en México y 20 especies animales entre las que se encuentran el Cuachalalate, Árnica, Manzanilla, Tomillo, Vainilla, Alacrán, Escamoles y Ajolote, el mercado puede ser muy productivo.
En ese tenor, Jiménez Merino considera factible propiciar la organización en la producción de las plantas medicinales para su posterior deshidratación y en lugar de enviar esas plantas secas a Europa para que ahí se elaboren los extractos, debemos procurar que ese proceso se haga aquí, con manos mexicanas para beneficiar el desarrollo económico de miles de familias.