Hipólito  Contreras

En el marco del Congreso Ordinario de la Confederación Nacional Campesina y del Cuarto Consejo Nacional de la Confederación  Nacional Agronómica,  Alberto Jiménez Merino fue nombrado Coordinador de la Red Nacional de Promotores de la Seguridad Alimentaria de esta organización agronómica.

Durante la toma de protesta del nuevo Consejo Directivo de los Agrónomos de México realizada por el Presidente de la CNC Gerardo Sánchez García, Alberto Hernández presidente del Gremio Agronómico Organizado del País, destacó que una de las mayores preocupaciones de los agrónomos de México es la alimentación de la población, especialmente la de más escasos recursos. Por eso,  en el nuevo Comité, “estamos creando la cartera de Coordinación de la Red Nacional de Promotores de la Seguridad Alimentaria con el propósito de identificar información y esfuerzos para desarrollar modelos que puedan ser socializados entre la población y ayudar a resolver la falta de alimentos.”

Durante su intervención, el Diputado Federal Alberto Jiménez Merino, agradeció la confianza y destacó que “la pobreza alimentaria es el problema socioeconómico más importante de México, porque es imposible que quien no tiene acceso a una  alimentación digna pueda aspirar a la riqueza, al progreso, a la grandeza y tener esperanza de una vida digna.”

La mayor prueba de lo anterior, aseguró, es que actualmente en nuestro país contamos con más de 10 programas oficiales enfocados a la reducción  de la pobreza y a la atención del problema alimentario. Todos  procuran resolver las necesidades  de alimentación digna, con pleno acceso a servicios básicos, a una educación y salud de calidad. Aunado a lo anterior, se tiene registro ante la Secretaría de Desarrollo Social de más de 1800 0rganizaciones de la Sociedad Civil, que realizan diversas actividades en apoyo a la alimentación. Grandes esfuerzos todos, en su mayoría sin relación alguna unos con otros.

Pero aún con estos esfuerzos que consumen grandes y crecientes cantidades de los recursos presupuestales nacionales, enfatizó que hoy tenemos más de 54 millones de pobres, 20 millones  en condiciones de pobreza alimentaria, más de 40 millones tienen algún grado de desnutrición, la obesidad y el sobrepeso afectan al 70% de los mayores de 15 años y según cifras oficiales, este problema le cuesta al país en su sistema médico más de 40,000 millones de pesos anualmente.

Señaló que de acuerdo a los últimos informes, la importación de alimentos supera el 54 por ciento del consumo nacional, el 33 por ciento de las necesidades de maíz con más de 9 millones de toneladas; 65 por ciento de trigo; 75  por ciento  de arroz y 95 por ciento de soya.

Si además consideramos que desde el 2008 a la fecha la importación de carne de bovino aumentó 440 por ciento; la de aves 280 por ciento; la de cerdo 210 por ciento; la de huevo 50 por ciento; 85  por ciento la de maíz y en 44 por ciento la de sorgo, este complejo panorama nacional,  se agudiza cuando nos percatamos que no hay reservas nacionales suficientes para hacer frente a contingencias de gran magnitud como la actual, pues se carece de un plan estratégico para la producción y abasto de alimentos.

El también presidente de la Fundación Científica y Cultural Isidro Fabela Filial Puebla, puntualizó que lo preocupante es que en lugar de disminuir los problemas tienden a crecer. La política federal de los últimos 10 años o quizá su ausencia, ha fallado lamentablemente a la gente, pero para no ser injustos, también muchos esfuerzos estatales y municipales han sido insuficientes.