alberto-jimenezMéxico, D.F. Para ofrecer a las familias y personas de bajos ingresos, acceso a financiamientos que permitan emplearse o autoemplearse y generar un ingreso que mejore su calidad de vida, el coordinador del Sector Agrario del PRI, Alberto Jiménez Merino propuso crear la Ley que crea el Instituto Nacional de Apoyo al Fomento del Microcrédito.

Consideró que más de 17 millones de micro pequeñas y medianas empresas que tienen menos de 50 trabajadores en su plantilla, no tienen, salvo en contadas opciones,  dónde acudir para obtener préstamos que les permita crecer.

Agregó que las micro y medianas empresas carecen de apoyos técnicos, tecnología, diseño y promoción de mercados, pero fundamentalmente de fondos para adquirir la materia prima con la que manufacturan sus productos, no les es posible sostenerse más de 2 años. “Es un drama socio-económico grave para quienes tienen capacidad emprendedora, porque no puede acceder a los recursos que le permitan un desarrollo gradual y exitoso.”

Ante la falta de financiamientos por no cubrir los requisitos mínimos, miles de mexicanos ven así perder la oportunidad de desarrollar un negocio y fortalecer su economía. Miles de artesanos,  pescadores, muebleros, dueños de fondas, restaurantes,  expendios, de proyectos turísticos, ecoturísticos y turismo de naturaleza, han visto truncado su anhelo de tener su empresa, orillándolos a la migración y al comercio informal como opciones de vida, enfatizó el diputado federal.

Panorama que ha generado preocupación al Poder Legislativo, por generar un entorno favorable que permita el desarrollo pleno de las personas en situación de desventaja, se ha dado a la tarea de diseñar estrategias que incidan de manera positiva en el ingreso de las familias mexicanas.

Es por ello que ante este panorama adverso, el legislador poblano propuso, en el primer periodo del segundo año legislativo, crear una institución gubernamental con la capacidad de generar impactos positivos inmediatos que coadyuven a mejorar la precaria situación de millones de mexicanos, a través de un microcrédito, el cual les permita poner en marcha pequeños negocios o desarrollar proyectos que les permitan generar un ingreso.

A través de la creación de un organismo público con personalidad jurídica y patrimonio propio, tentativamente, denominado “Instituto Nacional de Apoyo y Fomento al Microcrédito” con el fin de ser una institución del Estado que otorgue crédito a todas aquellas personas que se ubican en algún nivel de pobreza y, que por tanto, no tienen acceso al mercado formal de crédito.

Recursos que se obtendrán, dijo, a partir de la reasignación y redistribución de los diferentes programas gubernamentales que tienen como objetivo otorgar apoyos para el fomento de proyectos productivos sociales.

Jiménez Merino considera que este organismo público será el detonante de una nueva Banca de Desarrollo que contribuya al impulso de proyectos para la pequeña y mediana empresa, en los diferentes sectores productivos, principalmente a las familias de escasos recursos, ya que se considera al crédito como responsable de un tercio del éxito de los proyectos.

Puntualizó que esta propuesta, forma parte de un conjunto de acciones legislativas que tiene por objeto sentar las bases del desarrollo social sobre la plataforma institucional que permita lograr mejores resultados en el combate a la pobreza, la marginación y la desigualdad.