Representantes de la expresión perredista Izquierda Democrática Nacional patentizaron su desacuerdo por la transferencia de 5 mil millones de pesos del rubro de Educación del presupuesto de egresos de la federación, para sostener a comisionados del SNTE que no son otra cosa que los operadores políticos de la líder vitalicia Elba Esther Gordillo Morales.

Rosa María Avilés Nájera y Jorge Méndez Espínola destacaron la forma de actuar de la citada dirigente quien a través de acuerdo y componendas logra una vez más agenciarse de recursos públicos para mantener su estructura política.

No sería raro, dijo Avilés Nájera que estos acuerdos permearan al estado de Puebla ya que el titular de la SEP Darío Carmona se niega sistemáticamente a informar cuantos maestros están considerados como comisionados.

Así mismo expresaron su confianza en el que el nuevo gobierno estatal que encabezará Rafael Moreno Valle Rosas lleve a cabo una revisión general del sistema educativo poblano a fin de terminar con estas prácticas características del “sindicalismo charro”.

Por otra parte el regidor electo David Méndez Márquez criticó la donación de un terreno por parte del cabildo al sindicato de trabajadores del ayuntamiento de Puebla, acción que calificó como un pago de facturas por el apoyo que este organismo otorgó a lo largo de tres años a la administración de la que está al frente Blanca Alcalá Ruíz.

Desde un día antes de la realización del cabildo se había advertido de esta acción ilegal pero al consumarse el entrante gobierno municipal tendrá que retomar el caso desde la vía del amparo o desde la vía del juicio civil de nulidad porque se despojó de un predio a los poblanos y particularmente a los habitantes de la unidad habitacional de la Margarita.