El Arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, propuso abrir espacios pertenecientes a la Iglesia Católica,  para dar cobijo y auxilio a migrantes tanto nacionales como centroamericanos que son víctimas de todo tipo de abusos, destacando que si bien nuestras autoridades exigen buen trato para nuestros connacionales en la frontera norte, quienes proceden de países de Centroamérica y cruzan nuestra frontera sur, son objeto de violaciones en sus derechos.

Al hacer referencia al mal trato que recibiera el periodista Irineo quien efectuaba un trabajo de investigación sobre los atropellos de que son víctimas en territorio mexicano los migrantes centroamericanos, el Arzobispo hizo notar que no imaginó que la población de Soltepec, perteneciente a Puebla, fuera un importante centro de concentración de migrantes debido a que en la misma abordan el tren hacia el norte de la República.

Informó que a diferencia de los estados del norte, en Puebla no existen casas encargadas de apoyar a migrantes quienes tienen la oportunidad de descansar hasta por tres días mientras resuelven si regresan a sus lugares de origen o se arriesgan a cruzar la frontera norte.

Habría que destinar un espacio, dijo, aunque el mismo gobierno ubica a la Iglesia en un papel similar al de los polleros.

La Arquidiócesis de Puebla, ve con profundo dolor la entrada en vigor en Arizona, de la ley migratoria SB1070, expresó. El Arzobispado, unido al Episcopado Mexicano, expresa su solidaridad a nuestros compatriotas y a nuestros hermanos latinoamericanos residentes en los Estados Unidos.

Al mismo tiempo, recuerda que deben ser respetados sus derechos fundamentales. Uniéndose a la invitación del Episcopado Mexicano, el Arzobispado de Puebla eleva súplicas al Señor y pide a todas las parroquias en México, que reciban con caridad a quienes se vean forzados a regresar.

Víctor Sánchez, Arzobispo de Puebla, Lamenta entrada en vigor de Ley Arizona