La Secretaría de Desarrollo Rural, la Universidad Tecnológica de Tecamachalco y la Universidad Politécnica del Estado de Puebla, firmaron un Convenio de Colaboración que permitirá la construcción de  estufas solares y biodigestores de traspatio a bajo costo.

Gustavo Jiménez Aguayo, secretario de Desarrollo Rural, comentó que en el Plan Estatal de Desarrollo y en el Plan Sectorial, se contempla que las instituciones educativas de nivel medio superior se involucren en el desarrollo regional, pues deben convertirse en factor de progreso y desarrollo.

Es por ello que la Dependencia ha establecido, desde hace ya varios años, una estrecha relación con las universidades.


Señaló que los conocimientos e investigaciones que se generan en cada institución educativa deben ser aplicados en procesos productivos que se conviertan en innovaciones, para hacer más eficientes las actividades agropecuarias.

Agregó que, actualmente, las universidades tecnológicas cuentan ya con una lista de necesidades de cada una de las cadenas productivas. Es por ello que exhortó a los jóvenes estudiantes a seguir apoyando a los productores del campo.

Mencionó que la Universidad Politécnica fabrica estufas solares, para lo cual, los productores aportan el veinte por ciento.

Así mismo, la Universidad Tecnológica de Tecamachalco está construyendo biodigestores para pequeñas granjas a un costo que oscila entre 6 y 10 mil pesos y en donde el productor aporta el ochenta por  ciento.

Estos precios son cuarenta por ciento más económicos que los de cualquier otro  proveedor.

El titular de la SDR agradeció a los rectores de las Universidades por el interés de crear instituciones proveedoras de sistemas de energía renovable que, a  precios económicos, atiendan las necesidades que demandan los productores del sector rural, pues, además, son tecnologías que favorecen el cuidado del medio ambiente, el cual se ha visto afectado por el desmedido consumo de los recursos naturales por parte de los habitantes.

En la firma estuvieron presentes el maestro Juan Antonio Badillo Torres, rector de  la Universidad Politécnica de Puebla, José Antonio Garrido Natarén, rector de la Universidad Tecnológica de Tecamachalco, además de los productores que serán beneficiados con este Programa.

Cabe mencionar que la estufa solar cocina los alimentos en un promedio de 40 a 60 minutos, y la única condición es que lleguen los rayos del sol directamente.

Los biodigestores  tienen una capacidad de 5 metros cuadrados para los desechos de los animales, lo cual es transformado en gas metano o, incluso, usado para producir biofertilizante inodoro que puede ser a su vez utilizado en los cultivos.