- Sábado, 25 Mayo 2013 10:59
“Vean a los payasitos del centro manifestándose porque su fuente de trabajo ha sido lastimada y lacerada, fíjense de qué tamaño estamos hablando, alguien dirá: “ah los payasitos’’; los payasitos son padres de familia, son parte de familias que dependen, de que ellos haciéndole nudos a un globo o haciendo reír a alguien, esas familias puedan comer’’, señaló.
Explicó que su propuesta considera un modelo distinto, un proyecto centrado en las personas, que le apuesta a la solidaridad y si cada quien desde su trinchera abona, aporta para mejorar las cosas a todos los habitantes de esta maravillosa ciudad les habrá de ir mejor.
Pero primero, expresó, es necesario darle certidumbre jurídica a la ciudad, no solamente en el tema que tiene que ver con los negocios, sino también en el asunto que se refiere a los delitos que se cometen en esta Capital.
“Uno de los grandes problemas de la inseguridad se presenta en el Centro Histórico, según las estadísticas del INEGI, de los organismos que recogen los datos que tiene que ver con el delito, señalan que es en donde con mayor frecuencia se presentan los delitos que tienen que ver con robo a transeúnte y con robos que son muy peculiares, se les llama de hecho a los ladrones de esas zona cadeneros, porque se dedican a arrancar cadenas.
“Y todos sabemos que son delincuentes perfectamente identificados que si los agarran los llevan y salen casi inmediatamente porque hay un problema de normatividad y de reglamentación que no permite la aplicación de la ley con mayor rigurosidad y para poder enfrentar justamente a estos delincuentes y terminar con meterlos a la cárcel y que puedas darle una vuelta justamente al camino de la delincuencia (…) creo que es muy importante que este gobierno revise la reglamentación de todos los aspectos que tiene que ver con la ciudad’’, abundó.
Dijo que Puebla no puede tener una regulación que genere obstáculos, porque el derecho no se hizo para limitar el desarrollo sino para facilitarlo, es un principio de los juristas y cuando se empieza a convertir en un freno hay que modificarlo.
“En la mayoría de los casos son regulaciones obsoletas que han recibido algunos cambios, algunos ajustes y creo que simplemente como suele suceder con el derecho, el derecho debe ser congruente con la evolución misma de la realidad, la realidad cambia y la norma tiene que cambiar y se tiene que ajustar’’, expresó.
Agregó que en materia de negocios se requiere de mayor dinamismo y si lo que se requiere son empleos y trabajo, entonces se necesita una regulación que agilice y facilite con reglas claras, para que todos los que quieran invertir puedan hacerlo rápido y generar las oportunidades que hacen tanta falta.