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- Categoría: PODER EJECUTIVO
-Posible que los defraudadores operen en varios estados de la república
Dos familias, víctimas de timadores que clonan credenciales de elector y que promueven ventas de casas, gracias a la eficaz asistencia jurídica de la Procuraduría del Ciudadano alcanzaron un acuerdo; los beneficiarios fueron los legítimos propietarios del inmueble materia del fraude, quienes residen actualmente en la ciudad de México; y una anciana compradora de buena fe de la vivienda.
Derivado del actuar de los defraudadores, se presume que éstos operan en varias entidades federativas, sobre todo Estado de México, Distrito Federal, Tlaxcala y Puebla.
Por lo anterior, el Procurador del Ciudadano, lanzó un llamado a los propietarios de inmuebles y compradores de buena fe que hayan sido víctimas de los timadores a que acudan a las oficinas de la dependencia a recibir la asistencia jurídica correspondiente; al margen de dejar a salvo su acción de denunciar penalmente a los defraudadores.
Los timadores, de acuerdo a informes de las víctimas, leen el aviso oportuno para detectar a quienes intentar vender una propiedad, posteriormente vía telefónica, entran en contacto con el vendedor a quien le solicitan datos tanto personales como copia simple de escrituras del inmueble en oferta.
Ya con la información, el presunto comprador habilita a cómplices para hacerse pasar por el o los legítimos propietarios del inmueble, para ello clonan credenciales de elector a las que le sobreponen sus fotografías; posteriormente, acuden ante un Notario Público, donde piden se le protocolice un poder a favor del sujeto que se encargará de vender la vivienda.
Con el poder notarial, el defraudador promociona la venta del inmueble a posibles compradores que no dudan de su personalidad por el instrumento notarial que lo apoya; venta por cierto, que también se realiza ante Notario Público.
Tal fue el caso de la señora Amada Perete Villagómez, de 67 años de edad, casada, ama de hogar, quien en el 2001 compró a través de Arturo Luqueño, un sujeto que se hizo pasar por el representante de los legítimos propietarios, Prisciliano Méndez Sánchez y Guillermina Reyes León, un terreno de 260 metros cuadrados sobre la calle Vicente Suárez y la 14 oriente en esta capital.
La señora Perete Villagómez, al igual que su esposo no tuvieron duda sobre la personalidad de Arturo Luqueño, quien mostró un poder notarial extendido a su favor por la titular de la Notaria Pública No. 21 con sede en Tlanepantla, Estado de México, por lo que le desembolsaron más de 55 mil pesos como costo total de la operación.
Sin embargo, semanas más tarde, cuando los legítimos propietarios del terreno vinieron a esta Angelópolis para pagar el impuesto predial del inmueble, les informaron que ellos ya no aparecían en el padrón de contribuyentes como dueños, por lo que de inmediato acudieron al Registro Público de la Propiedad y Comercio donde les confirmaron la noticia.
De ahí los legítimos propietarios entraron en contacto con la compradora, con quien de manera verbal acordaron vender el terreno y repartirse el dinero, situación que no se formalizó ante la autoridad y quedó en el olvido.
Posteriormente, Prisciliano Méndez Sánchez y Guillermina Reyes León promovieron un juicio de nulidad de escritura bajo el expediente 266/2001 en el juzgado Sexto de lo Civil en esta capital poblana, proceso que quedó en la audiencia de pruebas, ya que los actores no promovieron.
Ante esta situación la compradora de buena fe Amada Perete Villagómez entró en contacto nuevamente con la parte actora, quienes nombraron como representante a su hijo Alfredo Méndez Reyes.
Fue así que en mayo de este 2009 las partes acudieron a la asistencia jurídica de la defensora pública, Leticia Morales Luna del área de Asuntos de lo Civil de la Procuraduría del Ciudadano, la que en este mes de agosto, logró conciliar entre las partes y mediante un pago de 67 mil 500 pesos a favor de la señora Perete Villagómez, ésta reintegrará a su contraparte el inmueble base del litigio.
Cabe recordar que el 11 de junio de 2009, la Procuraduría del Ciudadano a través de boletín alertó sobre el actuar de los defraudadores..." Vivales, con credenciales de elector apócrifas, con las cuales acreditan su identidad y domicilio para otorgar y obtener poder notarial, vienen timando con ventas de casas y terrenos a compradores de buena fe, ocasionando con ello, un daño patrimonial a éstos y a los propietarios originales...".
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