ahorroEl aguinaldo representa el esfuerzo de todo un año de trabajo por lo que debe utilizarse responsablemente durante las fiestas decembrinas, afirmó investigador de la BUAP.

En Puebla el 60 por ciento de la población activa en empleos formales percibe entre uno y tres salarios mínimos, lo significa menos de tres mil pesos de aguinaldo, considerando que por ley se deben recibir como mínimo 15 días de salario durante las primeras semanas de diciembre.

Dicho estímulo económico representa el esfuerzo de todo un año de trabajo, sin embargo la mayoría de la gente lo ve como un ingreso permanente el cual suelen gastar en cosas no útiles, cuando en realidad este dinero sólo es momentáneo y ha de servir para cosas realmente importantes, urgentes y de trascendencia.

El maestro Carlos de Castilla Jiménez, profesor investigador de la Facultad de Economía de la BUAP, en entrevista, advirtió que las familias deben ser responsables con la forma de gastar su aguinaldo.

MERCADOTECNIA VS CONVIVENCIA FAMILIAR

Las personas en la actualidad se preocupan demasiado por el regalo, y no por el afecto que debe mostrarse entre familiares; por ello, ante lo que calificó como “una reunión para consumir”, el académico consideró que lo mejor “es no regalar demasiado en esta navidad, y hacer prevalecer la unión familiar sin tener que demostrarlo con obsequios”.

En esta época, dijo, la publicidad “nos obliga o presiona” a consumir productos y servicios que no son del todo necesarios, por lo que las personas han de tener cuidado con lo que compran para regalar, ya que si se consume en exceso “tal vez no seamos capaces de cubrir dicho gasto”.

Otro detalle importante es el uso de las tarjetas de crédito, lo que puede ser letal, sobre todo si se combina con los famosos “meses sin intereses” o el “compre hoy y pague después”, que provocan que se gaste de más.

Lo adecuado, señaló el maestro De Castilla Jiménez es que quien aproveche estas promociones primero verifique los intereses de su compra, es decir, “el llamado Costo Anual Total (CAT), ya que algunos precios difieren entre el pago de contado y pago diferido.

Algo importante es que no es aconsejable comprar cosas que se van a consumir en una o dos semanas en la modalidad de meses sin intereses, “ya que puede pasar hasta año y medio después de la compra y seguiremos pagando lo que ya hemos consumido en el pasado”. Por eso, reiteró, la compra en esta modalidad sólo es recomendable para productos duraderos”. 

INDUSTRIA DE LA NAVIDAD

Al cuestionar al especialista en economía urbana y regional sobre el comportamiento del comercio y consumo en la época decembrina, señaló que aunque en la navidad intervienen muchas ramas industriales, “más bien se trata de una etapa del ciclo económico anual, en el que se dinamizan determinados sectores.

“Estos son los del transporte de personas en distintas modalidades,  mercancías, juguetes, productos para uso en el hogar (como los decorativos, muebles o electrodomésticos), o bien los alimentos de temporada como son  pavo y pierna, además de vinos y licores, entre otros”.

Además hay que considerar a las personas que en este periodo obtienen un ingreso extra gracias a los empleos temporales, lo que genera una derrama económica importante. En sí la actividad económica durante este periodo se activa, porque muchos productos que se fabrican durante el año se venden en diciembre, ejemplo, las esferas de Chignahuapan, los derivados de lana y por supuesto los juguetes, entre muchos otros bienes, añadió.

Es importante también que si se tiene pensado adquirir productos de importación, las personas atiendan a lo señalado por la Procuraduría Federal del Consumidor y verificar que traigan instructivos en español, haya una garantía y que demuestren haber pasado las pruebas de la Norma Oficial Mexicana

“Esto puede ser visible en las etiquetas de los artículos, junto con la información de la empresa importadora la cual debe responder, dado el caso, por la garantía del producto”.

El investigador recomendó también tener mucho cuidado con el dinero que llevan, ya que la inseguridad y los robos aumentan en esta temporada, y “no llevar grandes cantidades de dinero, joyas o ropa que llamen la atención sobre todo si van por lugares que no conocen o solitarios”.

Después de la calma… en enero viene la tempestad

En términos de mercadotecnia, enero es un mes en el que el mercado trata de absorber lo poco que queda del aguinaldo, sin embargo las familias quedan muy gastadas después de las fiestas decembrinas, más aun si se adquirieren deudas, ocasionando que generalmente el primer mes o incluso el primer bimestre del año sean muy difíciles.

Muchas personas tienen que recurrir al empeño de sus bienes que adquirieron semanas antes, o a los préstamos situación que afecta aún más su economía, por eso insistió en la necesidad de planear el gasto y si va a comprar algún producto de uso duradero, es mejor que se espere a enero porque muchos de los comerciantes realizan promociones y bajan precios.

Si puede pagar de contado es mejor porque se evita la angustia de estar pagando cada mes y ver como su ingreso le alcanza cada vez menos, subrayó el también coordinador de la Unidad de Apoyo al Estudiante de la Facultad de Economía de la Institución.

Destacó que las fiestas navideñas más que para regalar o consumir, “son para convivir con nuestros seres queridos, y una oportunidad para planear el presupuesto del 2011, donde a sus propósitos de año nuevo puede  ponerle pesos y centavos a cada uno de ellos”.

“En suma quienes reciben un aguinaldo deben planear muy bien qué se va a hacer con éste, utilizándolo en primer lugar para el pago de deudas, luego para la adquisición de productos o servicios necesarios para el hogar y ahorrar una parte para posibles imprevistos”.

Asimismo, “no abusar de las tarjetas de crédito y en la medida de lo posible, comprar bienes duraderos, y en general que los gastos que se hagan sean para la familia”, concluyó el maestro De Castilla Jiménez.