imss-logoHipólito Contreras

Comprar ropa de paca en tianguis y comercios informales representa un riesgo para la salud, ya que las prendas pueden estar infestadas de ácaros, piojos, contener algún tipo de químico e, incluso bacterias si es ropa interior, que al tener contacto con la piel provocan dermatitis, tiña, sarna y gonorrea.

 

Diana Castillo Martínez, dermatóloga del Hospital General de Zona del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), destacó que la ropa de paca tiene diversos orígenes: de  segundo uso, traída de otros países, rescatada de  tiraderos, o bien, puede provenir de asilos, morgues y hasta panteones.

Indicó que la primera recomendación es evitar en lo posible comprar este tipo de prendas. En caso contrario, se deben tomar las siguientes medidas: camisas, blusas, suéteres, etcétera, deben lavarse con jabón y agua, ya sea a mano o en lavadora, sin la necesidad de alguna temperatura en particular.

En el caso de chamarras, se tienen que depositar en una bolsa de plástico cerrada durante tres días, lo que asegura eliminar piojos y ácaros; misma situación para los zapatos, que se deben dejar expuestos al sol.

Explicó que no se recomienda adquirir, por ningún motivo, ropa interior en comercios no establecidos, ya que las medidas de higiene podrían no ser suficientes y causar gonorrea, “una enfermedad crónica difícil de diagnosticar. En personas jóvenes es causa de dificultad para tener hijos, por la severa inflamación que provoca en el aparato reproductor”.

La ropa de paca, abundó la dermatóloga Castillo Martínez, también puede estar infestada de ácaros que provocan escabiasis, enfermedad sumamente contagiosa –mejor conocida como sarna-, pues basta con que una sola persona la tenga para que se propague en toda la familia.

Explicó que la sarna se caracteriza por la presencia de lesiones rojas en la piel, sobre todo entre dedos, brazos, tronco, en genitales y mamas; provoca mucha comezón y se puede complicar porque con ese rascado constante y frecuente, sin lavado de manos, causa infecciones bacterianas secundarias que ocasionan malestar general y fiebre.

Destacó que algunas prendas esconden piojos entre las costuras, y éstos causan ronchas en diversas partes del cuerpo, que a su vez generan comezón y molestias, principalmente en el tórax y sitios cercanos a las costuras de la ropa, que requieren tratamiento dermatológico para sanar.

Asimismo, apuntó, que no toda la ropa de paca es de segundo uso; el problema radica en que puede estar tratada con químicos y éstos afectar la piel en personas susceptibles o con dermatitis atópica (enfermedad caracterizada por piel seca que provoca intensa comezón y se inflama fácilmente ante frío, calor extremo, o incluso sudor) y causar dermatitis de contacto, que se distingue por inflamación pruriginosa (salpullido) o ardorosa, en la parte del cuerpo donde la ropa o químicos estuvieron en contacto.

En los servicios de dermatología del Instituto Mexicano del Seguro Social se brindan a los derechohabientes diversos tratamientos para controlar y curar estas enfermedades; y en caso de contraer gonorrea, el paciente es referido con especialistas en áreas ginecológicas o de urología.