AGRÍCOLAEn su reporte mensual, el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) indicó que el IVF agropecuario aumentó 3.8 por ciento, en comparación con el mismo mes del año anterior, impulsado principalmente por la agricultura.

Detalló que el IVF de los cultivos cíclicos creció 4.1 por ciento, en relación con el mismo mes del año previo, por el desempeño mostrado en hortalizas como el jitomate, el cual avanzó a una tasa de 33.2 por ciento. Esto equivale a un volumen de 31 mil toneladas adicionales a las 94 mil registradas en el mismo periodo de 2011.


Otra hortaliza con un comportamiento destacado fue la cebolla, cuyo volumen de producción aumentó 25.7 por ciento, al pasar de 100 mil toneladas en 2011 a 126 mil en 2012.

 

En tanto, la producción de frijol reportó un alza de 108.9 por ciento a tasa anual; los estados de Baja California Sur, Sonora y Sinaloa aportaron dos quintas partes del volumen nacional.

Asimismo, tres cultivos forrajeros mostraron saldos positivos durante julio, maíz, avena y sorgo, los cuales aumentaron a una tasa anual de 30.8, 95.4 y 65.3 por ciento, respectivamente.

Además, la producción de trigo grano se incrementó 7.3 por ciento en el periodo de referencia al pasar de 71 mil toneladas en 2011 a 76 mil en 2012.

Asimismo, el SIAP reportó que el IVF de los cultivos perennes mostró un aumento de 16.6 por ciento en comparación con el mismo mes del año anterior, impulsado por los volúmenes de caña de azúcar y alfalfa verde, el primero avanzó 49.6 por ciento y, el segundo, en 21.5 por ciento.

Cabe señalar que el SIAP publicará el siguiente reporte sobre la evolución del IVF el próximo 10 de octubre.

El IVF es el primer indicador de su tipo que muestra el ritmo de la producción física agropecuaria del país desagregando entidad, producto y grupo de bienes. Es decir, permite conocer la producción por estado y su variación de manera mensual.

Este instrumento, desarrollado por el SIAP, toma como año de referencia para la elaboración de estadísticas comparativas el 2007, debido a que en ese periodo no ocurrieron contingencias climatológicas relevantes o eventos que pudieran afectar el comportamiento de la producción.