AUTOPROD“La coyuntura actual de alza y volatilidad de precios en alimentos ha permito revalorar la importancia de la producción doméstica de alimentos básicos, principalmente a pequeña escala. Así, la Agricultura Familiar, se convierte ahora en parte de la solución para fortalecer la seguridad alimentaria”, manifestó el Subsecretario de Desarrollo Rural de SAGARPA, Ignacio Rivera Rodríguez.

Subrayó que para la Administración Federal la seguridad alimentaria de México es una preocupación y una tarea para seguir trabajando.


En un sector rural y pesquero en el que se desarrollan 5.4 millones de unidades económicas, de las cuales alrededor del 70 por ciento presentan características de pequeña agricultura.En atención a la reactivación y desarrollo del sistema productivo del sector primario y la seguridad alimentaria, sostuvo que entre los nuevos programas puestos en marcha se encuentran los de apoyos a la inversión en equipamiento e infraestructura, ingreso agropecuario PROCAMPO y prevención y manejo de riesgos.

 

 

Al participar en el foro de la Confederación Nacional Campesina (CNC), detalló las líneas estratégicas del Gobierno Federal para promover la seguridad alimentaria de los mexicanos, como el desarrollo de capacidades de los productores y su agricultura familiar, innovación de sistemas de producción e incremento en la producción agropecuaria.

Estas acciones, dijo, están acompañadas del desarrollo de mercados locales, generación de empleos, incremento de ingresos y en la puesta en marcha de actividades tendientes a promover el uso de alimentos sanos para lograr la seguridad alimentaria.

En el encuentro celebrado en la ciudad de Guanajuato, Ignacio Rivera compartió que como parte de los avances de las políticas públicas aplicadas por la SAGARPA se encuentra el Programa de Modernización Sustentable de Agricultura Tradicional (MasAgro), que tiene como fin contribuir a aumentar la seguridad alimentaria, a mediano y largo plazo, en maíz y trigo.

Bajo este programa, resaltó que se trabaja con instituciones de investigación internacional que aportan la investigación, tecnología y metodología para aprovechar el mejoramiento genético de semillas y labranza de conservación.

Además del desarrollo de plataformas experimentales de los propios productores, de quienes se aprovecha su conocimiento y retroalimentación por las instituciones.

Por otra parte, mencionó al programa Trópico Húmedo componente gubernamental para incrementar la superficie, producción e impulso al financiamiento de los cultivos y actividades emblemáticas de las zonas tropicales húmedas y sub-húmedas del país, a través del otorgamiento de apoyos, vinculados al crédito preferentemente al amparo del Fondo Nacional de Garantías.

Otro proyecto transversal es el que tiene lugar en las zonas áridas del territorio nacional, donde opera el Proyecto Estratégico de Desarrollo de las Zonas Áridas (PRODEZA) con las líneas estratégicas para mantener la disponibilidad y eficacia en el uso del agua, y la reconversión a tecnologías y/o cultivos o especies de mayor adaptabilidad, menor demanda hídrica y mayor demanda de mercado.

Dentro de este programa se avanza en la reglamentación y tecnificación de agostaderos; la incorporación de los productores a la generación de valor agregado a la producción primaria, y se contribuye al uso sustentable de los recursos naturales de estas zonas.