FAOSEGUNDA PARTE:-Los virus de la influenza aviar como el H7N3, están presentes en las aves silvestres en forma natural constituyendo el reservorio principal de los diferentes subtipos virales existentes. La migración y el contacto con aves de traspatio o comerciales es la principal causa de la transmisión y del aumento de la virulencia de cepas de baja patogenicidad, que pueden transformarse otras cepas de alta patogenicidad.

 

La IAAP representa una grave amenaza para el sector comercial y por sobre todo para los pequeños avicultores y de traspatio, de forma directa debido a la mortalidad que puede causar, y de manera indirecta por las medidas aplicadas para combatirla. El impacto socioeconómico en  los pequeños productores puede ser significativo creando una seria barrera para el acceso a  los mercados locales con las consecuencias negativas que esto conlleva para la seguridad alimentaria, privándolos de proteína animal en su alimentación y del ingreso producto de la venta de aves y huevos, con la consecuente pérdida de oportunidades para mitigar la pobreza.

El  primer reporte de Influenza Aviar data del año 1924, en donde se confirmó un brote de IAAP subtipo H7 en aves en un mercado de aves vivas, en el este de EEUU.  Sin embargo, los reportes más continuos comienzan a partir de 1962, en Canadá y Estados Unidos. Transformándose en un problema real para la industria avícola entre los años 1983/84 con un brote de IAAP que implicó la destrucción de 17 millones de aves, con un costo de erradicación superior a los US$ 63 millones, identificando un virus del subtipo H5N2, el mismo subtipo que en 1994, se presentó en México, afectando simultáneamente a 11 estados.

El papel de la FAO ante la IAPP: La FAO ha ayudado a los países en la elaboración y ejecución de estrategias nacionales y regionales de emergencia y lucha de mediano y largo plazo, mediante la evaluación de la capacidad humana, infraestructura y políticas para la vigilancia, detección y lucha contra la influenza aviar, observando las consecuencias socioeconómicas de las crisis, así como los costos y las consecuencias de las medidas de control y del restablecimiento y reestructuración del sector avícola.

La FAO y la OIE elaboraron un plan mundial de lucha gradual contra la influenza aviar, y crearon una Red Mundial sobre la Influenza Aviar (OFFLU), con el fin de coordinar las investigaciones, proporcionar diagnósticos confirmativos, dar apoyo a los países mediante el suministro de expertos y mantener un enlace con la OMS en el análisis de las cepas del virus.

La FAO, en colaboración con la OIE y la OMS, se ocupa de las actividades mundiales de alerta rápida sobre la influenza aviar, a través del Sistema mundial de información y alerta (SMIA), situado en la sede de la FAO en Roma, para las enfermedades transfronterizas de los animales y las zoonosis.