FAOPRIMERA PARTE:Brote ha sido detectado en tres granjas de los municipios de Tepatitlán y Acatic, en el estado de Jalisco. Han muerto cerca de 200 000 aves y han sido destruidas otras 600 000.

Santiago de Chile.– Las autoridades de salud animal de México han confirmado la presencia de la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) subtipo H7N3 en tres granjas avícolas comerciales de los municipios de Tepatitlán y Acatic, en el estado de Jalisco, conocido como el principal productor de huevo a nivel nacional.

 

México ha implementando el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal. De acuerdo con la información enviada a la OIE, se está realizando la investigación epidemiológica. Las aves presentaron sinología clínica de carácter agudo y muerte, entre las 32 y 94 semanas de edad.

Hasta el momento han muerto cerca de 200.000 aves y han sido destruidas otras 600.000. La investigación epidemiológica apunta a determinar la magnitud del problema y la probable fuente de infección, para establecer medidas contraepidémicas que permitan una rápida eliminación del problema.

La influencia aviar en México: En México no se había registrado la presencia de este subtipo de influenza, la H7N3. El último brote de influenza aviar de alta patogenicidad ocurrió en 1994, y fue del subtipo H5N2, desde entonces se mantiene controlada la enfermedad.

Este subtipo de influenza tipo H7N3 es reconocido como muy agresivo para las aves de corral. En 1963 afectó a pavos en el Reino Unido, a principios de los 90 llegó a Australia donde mató a centenas de pollos, y en el 2002 se presentó un brote en granjas avícolas de San Antonio, en Chile, donde afectó a más de 500 000 aves con un costo de 31 millones de dólares. También se ha presentado en Canadá: en Columbia Británica en 2004, causando el sacrifico de 17 millones de aves y en 2007 en Saskatchewan, afectando a un plantel de reproductores.

En este contexto la FAO, hace un llamado a las autoridades de México para realizar todos los esfuerzos posibles en esta emergencia para contener los focos confirmados y tomar  acciones de prevención en otras regiones del país  y de esta forma contribuir a evitar una mayor difusión del problema.

Frente al riesgo de la influenza aviar, sólo cabe continuar mejorando los sistemas de vigilancia de enfermedades de aves, los procesos de notificación, agilizar los tiempos de la respuesta a los brotes y generar conciencia tanto en la sociedad como en todos los actores de las cadenas de valor productivas que se ven involucrados en la producción y manejo de aves, para mantenerse vigilantes ante la presencia de la influenza aviar.