disemina2México produjo en 2010, un millón 620 toneladas de productos pesqueros en sus extensos litorales y aguas interiores, producto del trabajo realizado en 19 mil 696 unidades económicas. De éstas últimas, una de cada dos (11 mil 134) se encuentra en el eslabón de producción: siete mil 810 realizan captura en aguas oceánicas e interiores y tres mil 324 desarrollan el cultivo de especies en sistemas acuícolas; estos centros de producción constituyen el soporte de 424 empresas que transforman gran parte del volumen pesquero nacional y de ocho mil 138 establecimientos que comercializan los bienes marinos. Del total del volumen pesquero de México, las unidades económicas de captura aportan ocho de cada diez toneladas generadas (83.5%); la flota marítima mexicana dedicada a esta actividad alcanzó 94 mil 111 embarcaciones en 2010.

 

Sinaloa es el principal estado por el número de unidades económicas dedicadas a la pesca (mil 58) además de contar con la importante flota en México (12 mil 590 embarcaciones), gracias a lo cual ostenta el segundo sitio en captura, generando en 2010, 226 mil toneladas de bienes marinos. Campeche en contraste, posee 840 unidades económicas y cinco mil 620 embarcaciones, siendo su captura la quinta más significativa (50 mil 946 toneladas). Sonora, que ocupa el cuarto lugar por el número de unidades productivas (675 establecimientos) y octavo en embarcaciones (cinco mil 439), es indiscutiblemente el número uno en captura: una de cada tres toneladas de productos pesqueros provienen de esa entidad (508 mil 825 mil toneladas). Los índices de productividad refieren cuánto se produce con determinada flota.

Entre 2001 y 2010 los niveles de captura se han mantenido constantes, mientras que la cantidad de embarcaciones ha decrecido 1.4 puntos porcentuales, es decir, poco a poco se produce más con menos. Tal condición es resultado de la transformación en la práctica pesquera que, como en el caso de la camaronicultura, cambian para asegurar una actividad sustentable y más provechosa.

La producción pesquera se encuentra supeditada a factores de orden productivo, comercial, ambiental, de fomento gubernamental, de estacionalidad y otros más, que inciden de manera diferenciada en la generación de bienes marinos. Los números de México en la materia, le permiten posicionarse como décimo quinto productor mundial y tercero a nivel latinoamericano, sólo detrás de Perú y Chile. Existe por tanto, un área de oportunidad importante para que el desarrollo de la acuacultura y mejores técnicas de pesca, catapulten en un futuro cercano a nuestro país como una potencia pesquera mundial.