sraHipólito Contreras

Los programas FAPPA y PROMUSAG de la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) contribuyeron a incrementar en 22 y 16.4 por ciento, respectivamente, el ingreso de las familias beneficiarias que instalaron proyectos productivos en zonas rurales con alto índice de marginación, concluye una evaluación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

 

El secretario de la Reforma Agraria, Abelardo Escobar Prieto, informó que el organismo internacional  analizó  los programas de la Mujer en el Sector Agrario (Promusag) y el Fondo para el Apoyo a Proyectos Productivos en Núcleos Agrarios (Fappa). 

El informe resalta que en el caso de Fappa, que apoya a habitantes que no tienen tierra, sus beneficiarios pudieron elevar sus ingresos en 22 por ciento durante 2010, a través de los proyectos productivos que pusieron en marcha en ejidos o comunidades.

En el caso del Promusag, que apoya exclusivamente a mujeres en núcleos agrarios sean o no titulares de tierra, el aumento en el ingreso de las beneficiarias fue del 16.4 por ciento, lo que destaca la FAO, representa un incremento importante, ya que la mayoría de las mujeres que forman parte de los proyectos productivos tenían ingresos económicos bajos e incluso nulos.

En lo que se refiere a la creación de empleos, los proyectos productivos apoyados por el Fappa generaron en promedio 1.9 empleos durante 2010. En algunos casos los socios se repartieron el tiempo de trabajo y de esta forma pueden continuar realizando las actividades que desarrollaban antes de recibir el apoyo del programa.

La evaluación destaca que, a poco más de un año de operación, el porcentaje de empresas con utilidades netas llegó al 42 por ciento y en promedio tuvieron utilidades por más de 65 mil pesos anuales. 

En lo que se refiere al Promusag, en materia de empleo señala que se generaron 1.56 empleos por proyecto productivo apoyado, el 59 por ciento de los cuales fueron permanentes y el 73 por ciento de ellos fueron ocupados por mujeres.

El informe agrega que el 39.2 por ciento de los proyectos apoyados logró utilidades durante su operación y en promedio tuvieron una rentabilidad del 22.4 por ciento anual.   

Para mejorar los programas de apoyo de la SRA, la FAO recomendó considerar la posibilidad de brindar un segundo apoyo a aquellos proyectos productivos que han tenido un buen desempeño, para que se consoliden y tengan un mayor crecimiento.

Asimismo, continuar y fortalecer las actividades de supervisión, especialmente en la fase de instalación del proyecto; reforzar la promoción de los programas en proyectos no tradicionales; y evaluar la posibilidad de un programa de rescate para aquellos proyectos que dejaron de funcionar por distintas causas, pero en los que los beneficiarios aún cuentan con infraestructura o equipos. 

El titular de la SRA manifestó la importancia de recibir las evaluaciones y recomendaciones hechas por la FAO para continuar mejorando el desempeño de los programas y que los recursos otorgados sean aprovechados, sirvan para generar riqueza y cumplan con su misión de cambiar la vida de las familias campesinas.