A pesar de que el crédito al sector rural se ha incrementado en 58 por ciento de 2006 a 2009, al pasar de 76 mil a 120 mil millones de pesos, es necesario desarrollar políticas  que permitan un sistema financiero rural completo que facilite el acceso de crédito a los pequeños y medianos productores.

Rodrigo  Sánchez  Mújica, director de los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA), afirmó que ningún tipo de financiamiento será suficiente si no va acompañado con asistencia técnica y capacitación para los productores.

Dijo que una de los principales limitantes para la obtención del crédito es que los propios productores desconocen los mecanismos para obtenerlo.


El director de FIRA informó que la estrategia de la institución contempla, además de la organización, la compactación de unidades de producción para que tengan una escala que les permita tener costos  más bajos, mayor productividad y un excedente que les permita acceder al crédito.

Señaló que el financiamiento no es la única solución para el desarrollo rural; sin embargo, representa una parte importante para lograrlo.

Para el director de FIRA se debe trabajar en la diversificación de la actividad productiva, acompañamiento   técnico de los productores, fomento a las actividades productivas, la conservación de los recursos naturales y el acceso a un mercado de proveedores de insumos de calidad; así como servicios de seguros y otras formas de administrar riesgos.

Sánchez Mújica reconoció que corresponde al Estado resolver el problema de crédito a través de la Banca de Desarrollo y las instituciones financieras, quienes deben complementar las necesidades de financiamiento y acompañamiento técnico.

Tras insistir en el impacto de la banca de desarrollo en el aumento de los ingresos y reducción de la pobreza en el medio rural, dijo que los servicios financieros tienen mayor impacto cuando se planean desde la perspectiva territorial y multisectorial, con  enfoque productivo, el otorgamiento de servicios financieros completos y el fortalecimiento a la diversificación de la economía rural.

Las políticas de financiamiento a pequeños productores, afirmó, están en resolver los obstáculos que limitan el acceso, tales como la dispersión de las empresas, altos costos de transacción, riesgos de producción, garantías insuficientes, productos inadecuados y baja competitividad.

Informó que se trabaja en cambios regulatorios que pueden posibilitar el que haya menos requisitos y que los productores  puedan tener un más sencillo acceso al crédito.

Dijo que la dependencia impulsará el crédito de largo plazo para apoyar la capitalización y la competitividad de las unidades productivas rurales.

Señaló que entre 2006 y 2009, FIRA y Financiera Rural han expandido la frontera de crédito al sector rural, lo cual se refleja en el incremento significativo de la colocación de crédito y productores beneficiados con financiamiento

De esta forma se logró el incremento del crédito hasta en 58 por ciento, beneficiando a un millón 733 mil 481 productores, a pesar de que 2009 fue un año de baja demanda de crédito de largo plazo.

Este año el Gobierno federal se ha planteado la meta de incrementar seis por ciento  el financiamiento al sector agropecuario, para incrementar el porcentaje de productores beneficiados, ya que durante 2009 cubrió sólo a 23.5 por ciento de los 4.1 millones que se tienen en el país.