Ciudad de México.- “Los pequeños y medianos productores de leche estamos conscientes de que tenemos el compromiso de producir cada vez más y mejor para una población que necesita un producto indispensable para su desarrollo físico y mental, pero exigimos un trato justo, comprensión y compromiso de parte de las instituciones del gobierno que prestan servicios al sector, sin simulaciones y desinformación”, señaló Álvaro González Muñoz.

 

El dirigente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, que agrupa a ganaderos lecheros de 20 estados de la República, insistió en que “el compromiso del gobierno y productores debe ser de confianza y reciprocidad, porque nos prometen una cosa y nos salen con otra”.

Comentó que “los productores de leche celebramos la declaración del titular de SEDESOL, Luis Enrique Miranda Nava (Milenio, 31 de marzo/2017) donde anuncia que la paraestatal LICONSA, sectorizada en esta dependencia, comprará este año el 80 por ciento de la leche que adquiere esa empresa a pequeños productores nacionales, lo cual significa que los ganaderos lecheros podrán entregarle más de 800 millones de litros”.

 Esto alienta a los productores a seguir adelante y aplauden que el gobierno federal hoy voltee a ver a la producción nacional como una alternativa que, sin duda, traerá beneficios a la economía nacional, ya que no habrá fugas de divisas por la mencionada empresa y se reactivará un crecimiento de la producción lechera y una dinámica más activa del consumo interno.

 Añadió que los productores de leche acudirán a la Cámara de Diputados y a la Secretaría de Hacienda, para que doten a LICONSA de los recursos suficientes que permitan a la empresa resarcir a los lecheros, como mínimo, el 15 por ciento que se ha perdido por efecto de la inflación de los últimos cuatro años.

Esta demanda se fundamenta en el alza que han tenido las materias primas e insumos, como alza en gasolinas, aumento de la paridad monetaria (por importación de forrajes y alimentos balanceados). “Esto indica que el costo real por producir cada litro del alimento, es de 7.19 pesos, sin considerar la ganancia que deberían tener los productores, mientras que el precio al que nos están pagando, es de 6.20 pesos/litro”. 

Precisó Álvaro González que, en 2015, la empresa LICONSA, adquirió 800 millones de litros de leche para el Programa de Abasto Social de SEDESOL; “en 2016 nos compraron alrededor de 700 millones, y lo aceptamos porque hubo reducción presupuestal; pero en 2017, LICONSA nos ha anunciado que solamente recibirá 600 millones de litros.

“Esto significa que tendremos que echar al drenaje más de 200 millones de litros este mismo año”, dijo González Muñoz y aseguró que no se trata de falta de recursos fiscales. Hizo cuentas y señaló que esta empresa distribuye 1,100 millones de litros anuales. De esta cantidad, a 700 millones de litros le incrementó un peso/litro.

 Además, añadió, cada litro de leche fresca natural, se somete a la extracción de crema      –que vende aparte—por un valor de 2.70 pesos/litro, pero le agrega grasa vegetal por 40 centavos. Si LICONSA nos la compra a 6.20 pesos/litro, resulta que compra esa leche realmente a un precio de 3.50 pesos. “Si la empresa tiene como objetivo comprarnos la leche más barata, con este mecanismo lo logra”, destacó.

Fue una ilusión que en 2015 nos compraran más de 800 millones de litros. Pensamos que nuestra colaboración, trabajo y esfuerzo, resultaría muy útil para desaparecer el espectro de la pobreza. Al final, el CONEVAL acaba de informar que en 2016 hubo dos millones más de mexicanos en pobreza, y esto significa desnutrición de millones de connacionales, apuntó.

Por otra parte, dijo, “tenemos fe y esperanza de que el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto reconozca que, de 2013 a la fecha, la inflación se ha ubicado en un nivel de 15 por ciento, y que es necesario que los aumentos de insumos para alimentar las vacas en parte son importados, y los energéticos elevaron los costos de producción por arriba del 25 por ciento. Como consecuencia de ello, añadió, se tiene que reconocer también que la inflación señalada implica que nuestros costos de producción ascendieron hasta 7.19 por litro.

En estas condiciones, Más de 11 mil pequeños y medianos productores de leche, añadió el dirigente, tenemos la incertidumbre de qué va a ocurrir, sobre todo a partir de junio cuando aumentan los forrajes vegetales y por el resto del año, cuando se espera un aumento considerable de la productividad lechera.

 Apuntó que esperan reunirse directamente con el secretario de Desarrollo Social, Luis Enrique Miranda, en virtud de que, de acuerdo con su opinión, la actividad lechera “va viento en popa”, y reconoce la labor de los productores de leche de varios estados, pero en realidad los problemas que enfrentan los productores es una visión encontrada respecto de lo que señala el señor secretario.