Los floricultores agrupados en el Sistema Producto Ornamentales afirmaron que se encuentran preparados para abastecer la demanda nacional de flor de zempoalxóchitl ante el tradicional Día de Muertos que se celebra en el país. Desde los primeros días de octubre comenzó la cosecha de la también  conocida Flor de Muerto para que esté presente en los altares que instalan los habitantes de México como parte de las celebraciones de esta temporada. Durante 2012, se produjeron 15 mil 344 toneladas de esta flor y más de un millón de  plantas,

con un valor  comercial de alrededor de  38 millones de pesos. Para la  temporada de 2013 se estima una comercialización de 16 mil 730 toneladas.
La superficie cosechada en 2012 fue de mil 735 hectáreas distribuidas en 12 entidades federativas.
Los estados que se dedican a la producción de esta flor son Puebla, Guanajuato, México, Querétaro, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, San Luis Potosí, Hidalgo, Morelos y Tlaxcala, así como el Distrito Federal.
Los primeros dos estados concentran el 80 por ciento del volumen producido, en tanto que en el  Distrito Federal y Estado de México se  presenta principalmente en macetas, como  planta de ornato.
Esperan comercializar un millón de plantas en el  D.F.
La Delegación de la SAGARPA en el Distrito Federal estima que los floricultores locales percibirán ingresos de aproximadamente nueve millones de pesos por la venta de un millón de plantas de zempoalxóchitl durante los meses de octubre y noviembre.
Alrededor de 700 productores, en su mayoría de la Delegación Xochimilco, venden la maceta en precios que van de los ocho hasta los 15 pesos.
La distribución y venta directamente del productor se lleva a cabo en los mercados de Cuemanco, Madre Selva, San Luis Tlaxialtemalco, el Palacio de la Flor y la Central de Abasto, así como en comercios. Estas actividades generan más de mil 500 empleos directos y dos mil indirectos en el DF, durante esta temporada.
La actividad agrícola en Xochimilco, de donde proviene el 80% de la producción ornamental local, está relacionada con las celebraciones religiosas y fiestas populares.
Establecen  estrategia  de comercialización y  potenciación  de la flor
A través del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), la SAGARPA coordina programas para la conservación y aprovechamiento de este cultivo, con el apoyo de investigadores de diversas instituciones y productores.
Mediante el Sistema Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (SINAREFI) se llevan a cabo proyectos individuales relacionados con el estudio de estas especies.
En 2008, se constituyó la Red de zempoalxóchitl y desde entonces se han venido apoyando proyectos en cuatro áreas estratégicas: conservación in situ, conservación ex situ, uso y potenciación de recursos, y creación de capacidades.
Uno de las más importantes contribuciones para el aprovechamiento sustentable de especies de zempoalxóchitl es el trabajo que se ha desarrollado para la obtención de bioplaguicidas, a partir de un proceso de destilación.
Otros proyectos vigentes de la Red son: caracterización y aprovechamiento sustentable del recurso fitogenético zempoalxóchitl y otras aromáticas de México para la agricultura; validación de germoplasma en el Norte de México (colecta de accesiones), y evaluación molecular de especies y variedades de Tagetes.
La especie zempoalxóchitl pertenece al género de Tagetes; este género se compone aproximadamente de 55 especies distribuidas en el continente americano.
En México, existen 35 especies de Tagetes, de las cuales 20 son consideradas prioritarias por sus metabolitos secundarios (aceites esenciales e hidrolatos: bioplaguicidas) y presencia de pigmentos (industrial y ornamental). En cinco especies se han realizado ensayos para la obtención de bioplaguicidas.
A la fecha se encuentran registradas 30 variedades en el Catálogo Nacional de Variedades Vegetales (CNVV), 19 solicitudes para título de obtentor y un título de obtentor otorgado.
La celebración del  Día de Muertos tiene su origen en las culturas prehispánicas de México, las cuales  en la temporada de cosecha ofrecían una parte de la producción a sus deidades en agradecimiento por lo obtenido