El Rector de la BUAP, Enrique Agüera Ibáñez, entregó a la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) las certificaciones de las ingenierías en Materiales y Agroindustrial, que fueron auditadas por los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIIES), así como de las ingenierías en Alimentos y Ambiental, evaluadas por el Consejo de Acreditación de la Enseñanza de la Ingeniería (CACEI).

Durante el tercer informe de labores de Oscar Arroyo Porras, director de la FIQ, Agüera Ibáñez indicó que la mejora y creación de laboratorios y aulas significan grandes avances en los últimos años, por lo que esta unidad académica es un referente de transformación en la Institución.

Puso de ejemplo dos grandes obras sin precedentes: la Biblioteca Central y el Estadio Universitario, que obedecen a viejos reclamos, ya que el primer espacio combina acervos bibliográficos físicos y digitales, comentó.

Destacó también la colocación de la primera piedra de la Ciudad de la Ciencia y el Conocimiento, proyecto en colaboración con el Gobierno del estado, que será una extensión de Ciudad Universitaria en Valsequillo, además de extender la oferta académica en este lugar.

En este espacio “por la naturaleza de las disciplinas que imparte y la investigación que realiza, esta Facultad debe de aspirar en su momento a poner sus pies muy firmes en esa zona, en busca de respuestas de los nuevos retos paradigmáticos que vive la humanidad, por ejemplo el cambio climático y la distribución del agua”, afirmó el Rector.

Sobre el informe de Arroyo Porras, señaló que “un informe es una gran oportunidad para hacer un balance de las acciones que se emprendieron, las cuales servirán en los avances y cambios de las mismas; es un ejercicio de responsabilidad y de rendir cuentas”.

Al rendir su informe de labores, el maestro Oscar Arroyo Porras, resaltó la prioridad que se le dio a las actividades académicas, el incremento de la planta docente con perfil PROMEP, así como el 100 por ciento de la acreditación de los programas educativos que integra la Facultad.

Al final el prestigio de los programas se vio reflejado en el interés de estudiantes extranjeros de Chile y Estados Unidos, por mencionar algunos países, en realizar intercambios académicos.

También subrayó el impulso de la infraestructura con 10 nuevos laboratorios entre ellos el de Biodiesel (único en el país que realiza el proceso de producción) y dos invernaderos que se instalaron en la Unidad Regional de Acatzingo para la carrera de Ingeniería Agroindustrial, sumando así un total de 38 laboratorios.

Mencionó los apoyos otorgados a los alumnos a través de becas estudiantiles y las tutorías que disminuyeron el índice de deserción.

El director de la Facultad de Ingeniería Química puntualizó que “73 años de historia nos hacen sentir orgullosos de nuestro pasado y nos honra realizar nuestro trabajo con calidad y responsabilidad para seguir formando las presentes y futuras generaciones, donde personal docente y administrativo, así como alumnos son los actores principales de este proceso”.