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Pocas mujeres tienen el poder de crear con sus propias manos galaxias completas, formadas de estrellas, gas y polvo cósmico. Este es el caso de la investigadora Olga Vega Casanova, una de las astrofísicas participantes de Ella es una astrónoma, evento organizado este fin de semana por el Instituto de Física Luis Rivera Terrazas, la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y el INAOE.
Olga Vega Casanova, joven investigadora del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) cuenta con este poder, ya que su actividad científica se centra en la creación de modelos para fabricar o simular galaxias, a través de los cuales se intenta entender y profundizar sobre su evolución en el universo.
Entrevistada antes de impartir la conferencia Fabricando Galaxias, celebrada en el marco de Ella es una astrónoma, Vega Casanova habla de su trabajo como creadora de galaxias, de los modelos que utiliza y de los objetivos que persigue.
Una de las grandes metas de la investigación astronómica actual, señala, es entender cómo evolucionan las galaxias y cuál es el mecanismo de energía que las gobierna.
"Sabemos que las galaxias no son iguales, que las hay viejitas, que no tienen casi gas ni forman estrellas, pero también hay galaxias que sí las forman constantemente, así que uno de los grandes objetivos es entender por qué ocurre esto y cómo evoluciona la formación de estrellas a lo largo de toda la edad del universo. Hasta ahora, la mejor manera de hacerlo es entender cuál es la diferencia entre una galaxia y otra, y por qué ocurren fenómenos distintos en ellas. Para entender qué ocurre internamente en estos objetos es necesario hacer simulaciones a través de modelos", agrega.
Las investigaciones de Olga Vega Casanova se centran en dos tipos extremos de galaxias: las viejas o elípticas y las ultraluminosas. Las primeras, formadas hace millones de años, convirtieron toda su masa de gas en estrellas; ahora evolucionan de forma lenta y dejan que éstas envejezcan tranquilamente sin ningún tipo de interacción.
Las galaxias ultraluminosas, descubiertas a finales de la década de los 80 con la ayuda del satélite Iras, forman estrellas a un ritmo muy acelerado de entre 100 y 500 estrellas por año. Este tipo de galaxias, apunta, se cree son los análogos locales de las primeras que se formaron en el universo temprano, cuando se generaban estrellas de forma muy activa.
Los modelos
El trabajo científico de Vega Casanova, una de las pocas astrofísicas en México dedicada a esta línea de investigación, es la construcción y aplicación de modelos de síntesis y evolución espectrofotométricas de galaxias. Su labor es combinar procesos físicos que ocurren en las galaxias con la ayuda de software especializado, para obtener un modelo de luz que simule galaxias reales.
Explica que la luz proveniente de una galaxia es el conjunto de distintas generaciones de formación de estrellas, "por eso lo que intentamos es mezclar todos estos distintos procesos de varias maneras, con programas numéricos en la computadora, y al final lo que tenemos son masas de gas formando estrellas".
Cada estrella, prosigue, a medida que envejece, adquiere características particulares: "Por eso nosotros introducimos estos procesos, y lo que obtenemos es un espectro simulado de una galaxia, una luz estelar muy particular.
A continuación lo que hacemos es comparar nuestro modelo teórico con la luz observada de la galaxia, y aquel modelo teórico que mejor reproduzca la luz observada es el que nosotros creemos que representa la galaxia. Al fabricarlo, sabemos cuáles son los distintos procesos físicos involucrados en el modelo, y podemos decir que esa física es la que corresponde a esa galaxia en particular", concluye.
La conferencia Fabricando Galaxias se realizó en el marco de Ella es una astrónoma, evento organizado por el Instituto de Física Luis Rivera Terrazas y la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la BUAP, con la idea de impulsar la vocación científica de los jóvenes, y particularmente de las mujeres hacia la astronomía.
Olga Vega Casanova forma parte de un grupo internacional de astrónomos y mantiene una activa participación con las investigadoras italianas, Laura Silva, creadora del código Grasil, así como Paola Marigo y Francesca Annibali, quienes trabajan en la construcción de la librería de espectros teóricos estelares, éstos últimos usados para simular estrellas.
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