Lucero Saldaña Pérez, Secretaria General del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional, reiteró que la dirigencia de este Instituto Político es respetuosa de las decisiones personales que tomen los militantes, particularmente de quienes deciden contender o apoyar a un partido distinto al PRI.

En atención a lo antes expuesto, el CDE no ha iniciado ni tiene intencionado entablar algún proceso de expulsión en contra de ningún militante.

Agregó que en este momento el PRI se encuentra concentrado en el proceso de reforzamiento de su estructura electoral rumbo a los comicios del primero de julio del presente año, a fin de que el priismo poblano ofrezca excelentes resultados en dicha contienda electoral.

Asimismo, dijo que otro de los procesos que vive el PRI es el de selección de aspirantes a precandidatos a Diputados Federales y Senador de la República, para ello está valorando en cada uno de los contendientes diversos factores como son: arraigo, ascendencia ciudadana, prestigio, vinculación con la ciudadanía y sobre todo que sean factor de unidad.

De igual forma enfatizó que es sumamente importante para el partido concluir la plataforma política que contendrá las propuestas que se ofrecerán a la ciudadanía a través de la cuales el PRI intentará subsanar los problemas sociales, económicos y políticos que han originado las pésimas acciones implementadas por el Gobierno Federal surgido del Partido Acción Nacional.

De tal forma que el partido tricolor ha priorizado su actuación en acciones que son importantes para la ciudadanía del País, por lo que las expulsiones de militantes no son temas que se encuentren en la agenda.

No obstante, precisó que todo militante al tomar la decisión de irse a otro partido automáticamente pierde sus derechos partidistas, sin embargo ello no implica que quede expulsado del PRI.

Por último, Saldaña Pérez descartó que el PRI sufra una desbandada en virtud de que al interior de este partido existe unidad en torno a un proyecto de nación, por lo que continuarán trabajando siempre con apego al marco legal en materia electoral manteniendo como premisa fundamental ganar la Presidencia de la República en el 2012 para reorientar el rumbo de México al progreso.