Hipólito  Contreras

La “Unión de Científicos Comprometidos con la  Sociedad” presentará este  jueves ante la PGR, una denuncia penal contra la transnacional “Monsanto”  por los delitos federales contra la bioseguridad y la riqueza  nacional, tráfico de influencias y fraude, anunció René Sánchez Galindo, abogado de la organización.

En este orden de ide as, Sánchez Galindo explicó: “ Son cuatro o cinco empresas en el mundo, Cargil, Bayon, monsanto y Dupont, que acaparan las semillas originales, como  el arroz de  Asia, el trigo de Europa, el maíz en  América. Monsanto, aseguró, pretende quedarse con toda  la información genética relacionada con el maíz de México.

René Sánchez  Galindo, defensor de derechos humanos y abogado de la Unión de Científicos comprometidos con la sociedad, indicó que  Diconsa en la  Sierra Mixteca y la  Sierra  Nororiental distribuye semilla sin ningún tipo de control, Monsanto, aseguró, se va a quedar con lo que es  un patrimonio nacional y por medio de las tiendas de Diconsa  va a poder sembrar su maíz transgénico.

Denunció que Monsanto está engañando tanto al gobierno del estado como a los campesinos, ha encontrado  14 variedades de maíz en el estado, ya tiene la información genética, puede apropiarse de las mismas, dice que el registro y patente la van  a tener los campesinos, sin embargo, el proyecto dice que  habrá estrategias de comercialización, mediante contratos se va a quedar con la información.

Informó que está integrando  con varios científicos  la denuncia, se hará un panel de peritaje, el jueves se presentará  en la PGR.

Indicó que en el mundo, en  primer lugar está el petróleo como riqueza, le sigue el gas, oro y el maíz, Monsanto lo que va a hacer es acaparar la semillas  con lo que cometerá el delito en contra de  la riqueza nacional.

Indicó que el proyecto de Monsanto lo realiza en Tlaxcala, Estado de  México,  Hidalgo y  Puebla, aquí, en Puebla,  lleva  tres o cuatro años con  14 variedades registradas, tiene la información genética de las variedades de maíz.

Afirmó que la información genética no la tienen los campesinos, hoy Monsanto las registra y vía contrato se quedan con los registros.