Arturo Nieto M./ El proceso interno de elección de nuevo presidente del Comité Directivo Estatal del PRI debe llevarse a cabo sin la intervención del gobernador Mario Marín Torres expresó en rueda de prensa Ignacio Mier Velasco quien  dijo compartir la opinión con su compañero y también militante Antonio Godina Herrera.

Mario Marín dijo, no debe tener un proyecto político reflejado en alguno de los aspirantes a este cargo partidista ni puede tomar el silbato de árbitro por el contrario debe atender las instituciones con ética política. Indicó que el respaldo del ejecutivo a Javier López  Zavala en nada ayuda a la recuperación del partido tricolor después de la derrota del 4 de julio.

Una y otra vez Mier Velasco hizo notar que el PRI se quedó sin jefe político y advirtió que de no llevarse a cabo una reestructuración el partido correrá un riesgo difícil de superar.

Es el momento de corregir lo que se hizo mal, añadió y propuso una elección de dirigencia abierta plural y equitativa, esto al tiempo de anunciar la entrega de un documento a la dirigencia actuante encabezada por Alejandro Armenta en la cual solicita que el Consejo Político Estatal de su partido de legitimidad al proceso. Un Consejo Espurio no legitimaría al nuevo dirigente estatal, indicó.

Emplazó por 8 días al CDE para que dé respuesta a las demandas que den certeza a este proceso como son la certificación de los Consejeros Estatales, la acreditación de que están en funciones, que se demuestre que su elección estuvo apegada a  los estatutos y que avale la Comisión Estatal de Procesos Internos y Justicia Partidaria.

No de haber respuesta, recurriremos a las instancias superiores y al Consejo Político Nacional, concluyó Ignacio Mier quien forma parte del grupo del ex alcalde, hoy diputado plurinominal Enrique Doger Guerrero.