- Martes, 31 Agosto 2010 04:36
- Necesario cambiar el rumbo de la educación y formación de recursos humanos
-Hay que cambiar el rumbo de la política social asistencialista
-No existe respaldo financiero para 17 millones de microempresas
Durante su intervención “Reformas legislativas contra la Pobreza”, en la Mesa Desarrollo Agrario y Social, en el Marco del Congreso Nacional Ordinario de Confederación Nacional Campesina, el legislador destacó el compromiso de los Diputados Federales del PRI para cambiar el rumbo de la política social que nos tiene al borde de ser un país en categoría de estado fallido.
Es inconcebible que cuando más recursos hay contra la pobreza, más pobres se generen, ya rebasamos la cifra de 54 millones de personas en esa condición, también tenemos más obesidad, más erosión del suelo, más pobreza alimentaria, más importaciones y mayor desencanto entre la población, dijo.
Uno de los objetivos como legisladores es cambiar el rumbo de la política social asistencialista que sólo hace más pobres, así como establecer un marco legal que genere las condiciones para crear los programas, asignar y direccionar los presupuestos y obligar a los distintos ordenes de gobierno a resolver los problemas desde el origen, agregó.
Recordó que en la Reunión del Grupo Parlamentario del PRI realizada en Ixtapan de la Sal, Estado de México, los diputados del Sector Agrario y los del Estado de Puebla, propusieron un paquete de Reformas, con la creación de nuevas leyes para reorientar la política social, mejorar la interrelación entre las diversas leyes y mejorar la coordinación intersecretarial que hoy es difícil porque cada ley creada sólo atiende un segmento de la realidad nacional.
Entre las principales propuestas para revertir la pobreza en México, se acordó impulsar la creación de la Ley de Sistema Nacional de Microcréditos, la Ley de Aprendizajes Artes y Oficios y reformar la Ley General de Educación para que atienda los principales problemas y necesidades nacionales que hoy se encuentran ausentes en los contenidos del sistema educativo.
La Ley de aprendizajes, artes y oficios tiene como propósito atender a 8 millones de jóvenes que no estudian ni trabajan y que no tienen ninguna esperanza de desarrollo ya que los hemos mandado al abismo y luego nos espantamos que se enrolan en la delincuencia, afirmó.
Una respuesta a la falta de apoyo financiero es la Ley de microcréditos, para quienes han emprendido o desean iniciar una actividad productiva a nivel micro que no es de interés para la banca privada, porque no ha sido negocio para los bancos prestarle a los pequeños emprendedores, quienes recurren a los fondos de la tarjeta de crédito con altísimos intereses ó a las casas de empeño, recurriendo con los usureros o cancelando la posibilidad del desarrollo productivo, indicó.
Por último sugirió que La ley general de educación debe reformarse para incorporar a los contenidos educativos el conocimiento de los recursos naturales disponibles en las comunidades, la identificación de talentos y habilidades en los educandos, así como la certificación de oficios para poder insertarse más fácilmente al mercado laboral para facilitar opciones a quienes no llegan a la universidad que hoy son 87 de cada 100 que se inscriben a primaria y promover la independencia financiera antes de los 20 años de edad.
Beatriz Paredes Rangel, dip.fed. Alberto Jiménez Merino y el líder nacional de la CNC Cruz López Aguilar