EN UNA CARTA DIRIGIDA A LOS MILITANTES,  EL EX DIRIGENTE NACIONAL QUIEN RECIEN ESTUVO EN PUEBLA PARA ANUNCIAR LA APERTURA DE SUS OFICINAS, DA A CONOCER SU SITUACIÓN DESPUÉS DE HABER DECLARADO EN TORNO A LA CORRUPCION

VOLVER A EMPEZAR


XII Comunicado
México, D.F., a 28 de abril de 2010.

Amigos panistas:

Durante los últimos meses he llevado a cabo una gira de presentaciones de mi segundo libro, Volver a Empezar, para promover la reflexión y el diálogo sobre los valores y la ética en la vida pública.

Esta gira inició con el acompañamiento de nuestro presidente nacional y muy frecuentemente he contado con la presencia de dirigentes estatales y municipales, así como de miles de panistas comprometidos con recuperar la mística democrática de Acción Nacional.

Durante una rueda de prensa en la ciudad de Toluca, previa a una de tales presentaciones, acepté que la corrupción también ha afectado a nuestro partido y que en el Estado de México es donde más daño ha causado este mal que desvirtúa a las instituciones.

Tras estas declaraciones, el Comité Directivo Estatal acordó solicitar a la Comisión del Orden del PAN mexiquense revisar la posibilidad de expulsarme del partido.

Hablar de corrupción en el Estado de México no es nada nuevo. Desde hace años, esa realidad ha sido conocida por el Comité Ejecutivo Nacional, por el Comité Estatal y por nuestros militantes de diversas partes del país.

La opinión pública nacional y la sociedad mexiquense conocen las tribulaciones del PAN local en el tema de la corrupción. Es por ello que no tenemos que buscar en la estrategia o en las campañas la causa de la derrota que sufrimos las pasadas elecciones, sino en el voto de castigo a la corrupción que nos llevó a perder las alcaldías del corredor azul. Y, lo que es peor, a perder también la credibilidad, el prestigio y la congruencia.

Por eso encubrir a los corruptos es una injusticia para la mayoría de nuestros militantes mexiquenses, quienes sí actúan con rectitud. En el PAN del Estado de México tenemos liderazgos y gobernantes excelentes, que le han dado honor y prestigio al partido. Sin embargo, los escándalos han opacado esta realidad y han impedido su proyección. Como la opacidad ha hecho confundirse al honrado y al deshonesto, la ciudadanía ha terminado por generalizar.

En Acción Nacional hay órganos que en lugar de deliberar cómo solucionar el problema de la corrupción han solapado a dirigentes y a funcionarios, práctica antidemocrática en la que el PAN del estado de México ha sido modelo. En lugar de aceptar esa dolorosa realidad y darse la oportunidad de corregirla, pretenden acallar a quienes buscan soluciones por medio del debate público y transparente. Es lamentable que desde adentro de Acción Nacional se atente contra la libertad de expresión, una de las principales manifestaciones de la dignidad humana. También lo es que en nuestro partido —que creció sobre la capacidad de debatir y analizar con espíritu crítico mostrada por nuestros fundadores— haya quienes no permiten que sea difundido el llamado a la ética lanzado por el humanismo político y plasmado en mi libro.

Por una patria ordenada y generosa

Manuel Espino Barrientos

Por criticar prácticas de corrupción, Panistas piden expulsión de Manuel Espino