Hipólito Contreras

El primer informe de labores del  gobierno de Puebla fue sin duda muy llamativo por  todo:   Las diversas obras anunciadas, las  declaraciones del ejecutivo, el imponente escenario del Centro Expositor (una mega obra de  la pasada administración), las medidas de seguridad con el uso de tecnología, el orden que prevaleció, los personajes que asistieron como  los  gobernadores de muchos estados, el rector de la UNAM, entre otros

El gobernador  habló de diversas obras que  se pusieron en marcha  durante el  primer año de gobierno:  hospitales en  varios  municipios,  tramos carreteros y de autopistas concesionadas,  redes de  agua  potable y alcantarillado,  las mega obras en la capital del estado como el distribuidor  Zaragoza, los libramientos  como  de  San Martín Texmelucan, el llamado paseo del  Río Atoyac, entre otras.

También destacó  lo dicho por el ejecutivo de que en Puebla no hay persecución de nadie  pero que tampoco se tolerará   la  impunidad  hacia   ciertos personajes de la pasada administración.

 

Todo bien, sin embargo, veamos lo que dijo  respecto al sector que debe ser prioritario en Puebla y el país: El sector agropecuario, más  importante  que las megaobras porque ahí se producen los alimentos, ahí están los recursos naturales  que nos sostienen y  más de la tercera parte de la población del estado. Esa es la  importancia del campo.

Del total del presupuesto del estado el año anterior, unos  56  mil millones de pesos, al campo  poblano se destinaron  menos del   dos por ciento, menos de 700 millones de pesos, una megaobra como  el distribuidor  Zaragoza se lleva el doble o el triple que  los destinado al campo.

Es lo que hay que   valorar, ¿Qué es lo prioritario para el estado?  ¿ Una  súper autopista  o un distribuidor como el Zaragoza, o ampliar la infraestructura en el  campo? Es cuestión de  valorar y de invertir en lo que  conviene a todos, no a un sector de la población.

El gobierno del estado anunció la entrega de mil monocultores o pequeños tractores, la entrega de  semilla y fertilizante y el pago  de  180 millones de pesos   a miles de productores   que perdieron sus cultivos por las heladas y sequías que dañaron  120  mil  hectáreas.  Esto  fue todo lo anunciado  para el campo.

Lo invertido al campo  el año anterior  fue casi igual a lo que el gobierno entregó a la BUAP, más de  600  millones de pesos y no es que sea  negativo entregar  más recursos a la máxima casa de estudios, si ésta ampliara su  cobertura para dar  cabida a más estudiantes, pero el campo necesita mucho más. Si la  BUAP  compite como  una de las mejores  universidades del país, el  campo de Puebla  también debe ser uno de los más fuertes del país, pero es todo lo contrario, es uno de  los más atrasados.

Si el factor climático ahora es   muy  fuerte en el país con más  fenómenos atípicos que dañan la agricultura y  ganadería, más atención debe tener el sector para evitar su desplome, se requiere más infraestructura, más proyectos,  más  mecanización, más  organización y capacitación, rescate y protección de la  biodiversidad, impulso  y aprovechamiento de los recursos  turísticos, protección de los grupos indígenas, sus lenguas, cultura y tradiciones.

Puebla no nada más es la  capital sino los  217  municipios, Puebla es su sector agropecuario y sus recursos, Puebla son sus  5. 7 millones de habitantes, todos  reclaman y merecen atención.

El campo  poblano sigue en espera de las grandes acciones de gobierno,  si hay millonarias obras para la capital ¿Por qué no las hay para el sector  rural y agropecuario?