andres-ortegaHipólito  Contreras

Andrés Ortega Tepotecatl,  vecino de  Cuautlancingo, denuncia  los abusos del presidente municipal, Filomeno Torres Sarmiento, afirmó que después de ser atropellado por una patrulla, los dan por muerto,  los policías se disponían a desparecerlo cuando  les dijo que estaba vivo, si embargo,  no le han pagado daños.

 

Informó que el 14 de junio a las  9:40 de la noche fue atropellado por la  patrulla, una camioneta, “quedé prensado, el policía se baja  y me jala, diciéndome que era un pendejo que  yo me había estrellado contra ellos y que dejara de estar chillando, le dije que me dolía mucho la cara, me  taparon con una cobija pesando que había perdido el conocimiento, llegó un doctor particular amigo de ellos, diciéndoles que se deshicieran de mi, porque esto ya estaba cabrón, me destapé diciéndoles que no estaba muerto”.

Tengo cicatrices de por vida, agregó, una operación maxilofacial,  tengo  20 tornillos y tres placas, lo que quiero es que se me haga justicia, no es justo que a mi edad, tengo  26 años, he perdido un poco de sensibilidad, veo un poco borroso, soy el único sostén de mi  familia.

Por su  parte  Ana Luis Piñataro  Flores, juez  calificadora de Cuautlancingo, denunció  que por dar a conocer estos abusos de la autoridad fue despojada de su oficina, “le hice  un señalamiento al presidente en la  Comisión Estatal de  Derechos Humanos por el abuso de autoridad por parte del presidente  municipal, Filomeno Torres Sarmiento”.

Indicó que el señor  Ricardo Mendizábal, secretario el presidente, le dijo que a él le toca hacer  el trabajo sucio del presidente, “por eso se ha negociado   tu puesto, te tienes que ir porque nos estorbas”.

Les estorbo, dijo, por ejercer la justicia, por ser mujer y no estar de acuerdo con todo este abuso ante  el ciudadano, no voy a permitir que se haga más el abuso sobre los ciudadanos de las juntas auxiliares de  San Lorenzo  Almecatla, Sanctorum , Chiautenco  y la cabecera  municipal.

Advirtió que si algo le llega a pasar responsabiliza al presidente  municipal y el comandante José Luis Larios Valencia, el me dijo, “que casos tiene, si  yo los detengo y usted  los deja ir”.