asmaEl asma es una enfermedad crónica que afecta al aparato respiratorio; se produce por una inflamación de los conductos que llevan el aire a los pulmones ocasionado, en la mayoría de los casos, por ciertos estímulos conocidos o desconocidos del medio ambiente. Los síntomas principales del padecimiento suelen ser la tos crónica, el silbido en el pecho y la dificultad para respirar.

La doctora Gabriela Carrasco Trinidad, especialista en alergología de la Unidad Médica de Alta Especialidad “San José”, explicó que este padecimiento puede afectar a personas de cualquier edad; sin embargo, es más común en los niños. Hasta el 6 por ciento de la población infantil es afectada por este padecimiento.

“Son pocos los casos que se llegan a presentar en adultos de edad avanzada, y si esto sucede es debido al contacto con sustancias tóxicas en el entorno laboral o bien por consumir tabaco”, aunque la especialista explicó que existen dos tipos de asma: alérgico y no alérgico. Ambas se diagnostican a través de radiografías, evaluación de antecedentes genéticos y pruebas de la función respiratoria (espirometría).

Se diferencian porque la alérgica se determina por factores muy específicos, a través de una prueba cutánea conocida por su nombre en inglés “test prick”, que consiste en poner al paciente en contacto con las sustancias alergénicas mas comunes como el polvo, pelo de animal y plantas para evaluar la reacción ante estas sustancias y de ese modo poder desarrollar una vacuna que se le aplicará para ayudar a erradicar el problema.

En el caso de asma no alérgico, las causas que la originan son desconocidas, por lo que no se puede ofrecer algún tipo de vacuna y únicamente se controla a través de medicamentos antiinflamatorios en presentación de aerosoles, polvo seco, pastillas para desinflamación del bronquio, tanto para abrirlo a largo plazo como de manera inmediata cuando se presentan las llamadas crisis de asma.

Para diagnosticar asma en los niños menores de cinco años, primero se deben descartar infecciones bacterianas, víricas y la presencia de cuerpos extraños en las vías respiratorias, sin embargo, las infecciones respiratorias frecuentes y la tos constante deben ser un signo de alerta.

Si se tienen antecedentes familiares con problemas de alergia, se debe tratar de coadyuvar modificando el ambiente: quitando el polvo, los animales domésticos, las alfombras, y los  muñecos de  peluche dentro de la casa, esto ayuda a disminuir el riesgo de que el niño desarrolle el padecimiento.

Finalmente, la doctora Carrasco Trinidad indicó que el asma es una enfermedad controlable, que permite al que la padece llevar una vida normal siempre y cuando se tomen las medidas necesarias a tiempo, se evite la automedicación y se siga el tratamiento indicado por el especialista.