México debe tener un mejor control en el crecimiento de las ciudades, viviendas, rehabilitación de áreas deterioradas y el mejor desarrollo de un gran número de terrenos baldíos dentro de la mancha urbana, para así aprovechar los espacios que aún se tienen, aseveró Maricela Medrano de Luna, urbanista del Condado de Hillsboro ugh County en Tampa, Florida, Estados Unidos.

En su conferencia Desarrollo Sustentable, dentro del “Primer Congreso Internacional de Urbanismo en Puebla” que lleva a cabo la Facultad de Arquitectura de la BUAP, indicó que para lograr este fin el urbanista debe reflexionar sobre  elementos como  el desarrollo sustentable, diversidad de suelo y áreas públicas que promuevan la interacción social.

“El mayor reto del desarrollo urbano estriba en garantizar el equilibrio en el crecimiento de las ciudades y armonizar las necesidades comunitarias,  promoviendo el orden y respeto de los recursos naturales, humanos y financieros”. Por lo tanto, la responsabilidad del urbanista es inmensa, ya que sus acciones serán trascendentales, aseguró la urbanista.

Explicó que para delimitar la distribución poblacional en Tampa, Estados Unidos, “se delimitó el crecimiento urbano, advirtiendo a los habitantes que instalarse fuera de los límites,  no recibirían servicios de agua, drenaje y luz”; así se promovió el desarrollo de terrenos baldíos y la construcción del 80 por ciento al interior de la ciudad.

Comentó que otro ejemplo es el Fraccionamiento Westpark Village, que promueve la interacción social;  la ubicación de áreas comerciales en el primer piso de los edificios, para que el resto sean viviendas; estacionamientos ubicados detrás de los inmuebles y construcción de áreas verdes y plazas.

Sin embargo, reconoció que “a pesar de las tendencias y esfuerzos del gobierno estadounidense, aún existe la presión de personas que prefieren comprar una casa fuera de la mancha urbana”.

Por otra parte, Maricela Medrano de Luna,  mencionó que los principios del urbanismo son mejorar la calidad de vida de los habitantes, promover una participación ciudadana, conectividad urbana, diversidad del suelo y el tipo de viviendas, así como establecer un transporte inteligente. Esto con el fin de que los beneficios sean: menor tráfico de vehículos, reducción de contaminantes, mejora de la imagen de la ciudad y un menor riesgo de crecimiento.

En la inauguración del congreso, el director de la Facultad de Arquitectura, Arcadio Hernández Aguilar, destacó que éste reforzará la vida académica de la Institución, porque se transmitirán conocimientos del ámbito que se involucran con diversas áreas científicas.

“Con temas sobresalientes entre el humanismo, globalización y sustentabilidad, los asistentes indagarán entre las distintas ciencias, los paradigmas que convergen en el concepto del nuevo urbanismo, el cual minimizará el impacto del deterioro de la naturaleza, para buscar una mejor calidad de vida social”, puntualizó el funcionario académico.