captura-camaron-sinaloaCon una se inversión de 42 millones 900 mil pesos, en 2011 fueron retiradas 33 embarcaciones camaroneras como parte del Programa de Retiro Voluntario para aminorar la presión sobre esta pesquería.

Con este esquema, además de impactar en el redimensionamiento de la flota camaronera, se registra un incremento de la producción y se favorece la rentabilidad y competitivi dad en el sector.

Con el objetivo de fortalecer el aprovechamiento sustentable de la actividad pesquera,  la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) retiró de manera voluntaria en 2011 33 embarcaciones camaroneras de flota de altura.

 

Lo anterior se logró a través de la acción voluntaria de los beneficiarios de entregar a la CONAPESCA las concesiones y/o permisos de pesca comercial vigentes para su cancelación y la destrucción total de su embarcación, informó el Director General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola de la CONAPESCA, Hilario Pérez Figueroa.

Agregó que para el retiro de embarcaciones el pasado año se invirtieron a nivel nacional 42 millones 900 mil pesos.

Estas acciones emprendidas, abundó, tienen lugar en apego a las recomendaciones de la Carta Nacional Pesquera, que señala la necesidad de disminuir el esfuerzo de pesca, como parte de las acciones para la administración integral y sustentable del recurso, es por ello que el gobierno de la República, a través de la SAGARPA-CONAPESCA, lleva a cabo desde el 2005 el Programa de Retiro de la Flota Camaronera Mayor, con los siguientes resultados:

La CONAPESCA ha aportado recursos federales por un monto total de 593 millones de pesos para el retiro, en ambos litorales, de 527 embarcaciones. El monto pagado por embarcación retirada en los primeros años de operación del programa fue de un millón de pesos y a partir del 2009 se incrementó a 1.3 millones de pesos.

De conformidad con la Carta Nacional Pesquera 2004, el esfuerzo aplicado a la pesquería de camarón de altamar en nuestro país era de dos mil 47 embarcaciones, el cual, mediante este programa de retiro voluntario y el programa de retiro administrativo se dejaron de expedir 263 permisos de embarcaciones que no han operado en los últimos años, se cancelaron un total de 790 permisos o concesiones, con lo que disminuyó a mil 257 embarcaciones en 2011, lo que significa una reducción en el esfuerzo pesquero del 38.5 por ciento en el camarón.

Pérez Figueroa recalcó que con la puesta en marcha del componente de disminución del esfuerzo pesquero se plantean impactos en el redimensionamiento de la flota camaronera, un incremento de la producción en la flota activa e impacto en la rentabilidad y competitividad del sector.

El impacto del retiro voluntario, agregó, también resalta en el ahorro que representa para el programa de apoyo al diesel marino de las embarcaciones que han dejado de operar, así como en la disminución de las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.