Luego de señalar que en México la carne de res es la proteína animal de más consumo, con 17 kilos anuales por habitante, Alejandro Carvajal Hidalgo, dirigente estatal de El Barzón indicó que para cubrir las necesidades del mercado interno el país tiene  un inventario estimado en 30.5 millones, de cabezas de ganado, que producen 1, 799.5 mil toneladas de carne, que son comercializadas por cinco grandes empresas que actúan con prácticas monopólicas en perjuicio de los pequeños productores.

Como ejemplo mencionó que el Conglomerado SUKARNE, controla un inventario anual de 952 mil cabezas de ganado, Consorcio DIPCEN 80 mil cabezas, Grupo VIVA 50 mil, Grupo Industrial ARIAS 46 MIL, Grupo Carranza 35 mil, Grupo JUSI 33 mil, Carnes la Laguna18 mil seguidas de los Grupos PROKARNE de Saltillo, Carnes Alba y Grupo Forrajes y Engordas con 10 mil cabezas cada uno, aproximadamente.

Estas empresas, dijo Carvajal Hidalgo,  han logrado diversificarse y ocupan posiciones claves dentro de la industria, son propietarios de plantas de sacrificio y procesamiento, control de centros de acopio, compra y comercialización de ganado y por los volúmenes de insumo que manejan obtienen precios preferenciales y dejan en desventaja a los pequeños productores que deben pagar precios más caros por los insumos para cría y engorda del ganado,

El alto costo de producción de la carne y los monopolios provocan que  a los pequeños productores se le pague menos, por la carne en pie o en canal, sin embargo, el precio de la carne procesada no varía  y esto significa que  las empresas procesadoras y comercializadoras de carne se quedan con la mayor parte de las ganancias en perjuicio de  los consumidores y productores.

 

En este contexto el Barzón demanda que las dependencias del sector agropecuario expidan ordenamientos legales, protocolos, para evitar que las prácticas monopólicas de los grandes empresarios exterminen a los pequeños ganaderos del país.