Con la pesca anual de atún se podrían producir alrededor de 1,800 millones de latas de este producto. La pesquería de túnidos es una de las más importantes actividades económicas pesqueras a nivel mundial y es importante por la generación de empleos, tanto directos como indirectos, además contribuye a la generación de divisas extranjeras, ingreso gubernamental, así como a la seguridad alimentaria del país, por lo que, la pesquería del atún, contribuye de manera substancial al desarrollo regional y nacional.

En México, la actividad atunera comenzó a principios del siglo XX, pescadores portugueses operaban cerca de las costas de California en EU y en Baja California, pero el producto era procesado en San Pedro, California, EU. En 1925 comenzó, en Ensenada, el enlatado de atún; las empacadoras “Planta Nacional de Productos Marinos” y “Compañía de Productos Marinos S.A.”, de Cabo San Lucas, fueron las pioneras en este negocio.

El atún ocupa el segundo lugar de la producción pesquera nacional con poco más de 129 mil toneladas capturadas anualmente. Las principales variedades capturadas son: atún aleta amarilla, aleta azul y patudo. El consumo per cápita de atún es de 1.4 kilogramos.

En la actualidad el principal productor de este valioso pez, es Sinaloa, pero Baja California, que se encuentra en el cuarto lugar, genera un mayor valor de la producción.

El atún es un pez pelágico (de los mares profundos), tiene un cuerpo alargado, el dorso azul oscuro y el vientre blanco, su cuerpo se encuentra cubierto de un “mucus” que reduce la fricción con el agua, es un buen nadador y recorrer grandes distancias.