Producto de la cultura del esfuerzo, dos veces secretario de Desarrollo Rural y diputado federal por Puebla de las LIX y LXI Legislaturas, el rector más joven de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) e impulsor del aprovechamiento del agua, agricultura familiar y desarrollo de cadenas productivas del estado, Alberto Jiménez Merino recibió el grado de Doctor Honoris Causa por parte de la Universidad Mesoamericana, campus Puebla.

El hombre de origen mixteco (Tecomatlán, Puebla, 1959) fue reconocido por el Claustro Académico de la Universidad Mesoamericana de Puebla por su loable trayectoria y destacados logros profesionales tales como sus aportaciones al campo poblano a lo largo de más de 30 años de ejercicio de la agronomía, en los que ha sido impulsor del aprovechamiento del agua, agricultura familiar, desarrollo de cadenas productivas, así como de más de 250 innovaciones para el sector agroalimentario, como la acuacultura, cultivo del bambú, pitahaya, alimentos para el ganado, plantas medicinales, y actualmente por el impulso a cultivos alternativos como la chía y la quinoa, los cuales aportan un alto valor nutricional a los consumidores.
Alberto Jiménez Merino es egresado de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), en la que se graduó en 1982 como  Ingeniero Agrónomo Zootecnista. Fue también profesor- investigador y director de la Facultad de Zootecnia. Resultado de su disciplina y constancia, 8 años después de terminar sus estudios, fue el rector más joven en la historia de la UACh, con apenas 30 años de edad.
Es un convencido de la cultura del esfuerzo, para el desarrollo personal, del estado y del país: “la misión de mi vida es servir a mis semejantes, porque no hay mayor alegría que ayudar siempre que se tenga esa posibilidad”, es la base de su pensamiento.
Resultado de acciones de cooperación internacional, logró firmar convenios con instituciones de China, España, Cuba, Colombia y Chile, lo que derivó en avances importantes en la producción de caña de azúcar, bambú, nogal de castilla, invernaderos y agricultura familiar.
Jiménez Merino, actualmente delegado en Puebla de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) del Gobierno de la República, ha sido en dos ocasiones secretario de Desarrollo Rural de la entidad y diputado federal a las LIX y LXI Legislaturas del Congreso de la Unión.
En sus responsabilidades como servidor público, ha ponderado la capacitación y asesoría técnica, “como servicios fundamentales de la transformación humana y la agricultura de conservación como el principal factor de la productividad”.
Este eje de su pensamiento, se refleja en la autoría de más de 250 artículos científico-técnicos y 15 libros, entre los que destacan “Herbolaria Mexicana” y “Agua para el desarrollo“.
El luchador imparable
Alberto Jiménez Merino, desde su infancia, salió del hogar familiar, en el municipio mixteco de Tecomatlán, Puebla, para estudiar en internados y desde entonces siguió con devoción la recomendación que le dio su madre al partir en el ya lejano año de 1971: “vete, prepárate y ayúdanos”.
A casi 43 años de esa fecha y esas palabras que permanecen profundamente arraigadas en su mente y son base de su inspiración, Jiménez Merino puede echar la vista atrás y contar muchos logros personales, pero también acciones y obras que han beneficiado a su estado natal y a varias otras entidades del país.
Por ello, tras ser investido con esclavina, anillo, toga y birrete y serle otorgado el grado de Doctor Honoris Causa, Alberto Jiménez Merino agradeció tal nombramiento y reconoció el apoyo de su esposa, familiares y amigos, pero en especial de sus padres, quienes cimentaron sus principios y valores a través de su educación. De igual forma, destacó el valor y reconocimiento a Rubén San Luis Meneses, su mentor, “quien me brindó los bienes necesarios, hospedaje y alimentación, para poder estudiar la secundaria y a quien le agradezco porque sin ese apoyo, yo no hubiera podido continuar con mis estudios hasta graduarme de ingeniero agrónomo en Chapingo”.
Asimismo, señaló que durante su infancia, fue pescador y acarreador de agua, lo que le permitió obtener las más grandes lecciones de su vida, y lo que lo llevó, en la actualidad, a poder dar mayor impulso a la acuacultura y al rescate de las especies acuícolas, así como escribir un libro especializado en la problemática del agua y su posibles soluciones.
El poblano Francisco Alberto Jiménez Merino ha sido consultor de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), en Educación Agropecuaria; creador del programa de Desarrollo Regional Integral de la Mixteca, Bordos, Pastos y Ganado; de programas de desarrollo agropecuario y rural en Puebla y otros estados del país.
Ha sido ponente en congresos científicos en México, Cuba, Francia, Venezuela, Costa Rica, Estados Unidos, India, Botswana y Argentina. También ha realizado misiones tecnológicas a Chile, Holanda, Alemania, España, China, Brasil, Guatemala, Cuba, El Salvador y Colombia.
Alberto Jiménez Merino recibió el grado “Doctor Honoris Causa”, por parte de la Universidad Mesoamericana el pasado 28 de agosto, en el paraninfo del campus sur de dicha universidad en una ceremonia en la que también fue reconocido al Médico Veterinario Zootecnista, Marco Antonio Hidalgo Mendoza, a quien se le reconocen a nivel nacional e internacional, sus aportaciones dentro de su rama.