inapesca

El Instituto Nacional de Pesca (INAPESCA) realizó transferencia de biotecnología de fotoperiodo a unidades trutícolas en cinco entidades de la República, con la finalidad de impulsar la producción de huevo de trucha, lo que propiciará menor dependencia de la importación de este producto y mayor disponibilidad de esta  especie con alta demanda en el mercado.
Productores de Hidalgo, Oaxaca, Michoacán, Chihuahua y del Estado de México, cuentan ya con esta tecnología y reciben asesoría de parte de especialistas del INAPESCA,

a fin de aplicar con éxito los procedimientos del fotoperiodo en el proceso de reproducción de la trucha arcoíris.
La implementación de esta tecnología garantizará la disponibilidad de semilla de calidad para granjas de engorda, además de abrir la posibilidad para la creación de nuevas empresas dedicadas a la producción de huevo y crías de trucha que demanda el mercado nacional, cuyas compras en el exterior ascienden a más de 18 millones de huevecillos al año.
Actualmente, el centro acuícola “El Zarco” y la unidad trutícola “Tatakany”, ubicados en el Estado de México, así como las unidades trutícolas “Santa Catarina”, en Hidalgo, y “Trucha Los Cedros”, en Oaxaca, cuentan ya con la tecnología adaptada por el INAPESCA.
Mediante esta innovación se puede controlar la maduración reproductiva de la trucha arcoiris, con la aplicación de luz artificial que permite la manipulación de la duración del día, lo que hace posible adelantar o retrasar la ovulación y la espermiación de los organismos.
En el Centro de Producción El Zarco se cuenta con más de 1.4 millones de huevecillos y crías. Desde la implementación de este proyecto a la fecha, el Zarco ha incrementado su producción en alrededor del 30%. En Tatakany la producción se incrementó también en 30% por ciento, lo que le representa mejores ingresos para el truticultor.
En cuanto a las granjas de las otras entidades, algunas se encuentran en las etapas de adaptación de infraestructura, acopio y maduración de reproductores con resultados favorables, como es el caso de Pucuato, Michoacán, donde ya se cuenta con crías de trucha derivadas de este proceso tecnológico.
La Trucha Arcoiris, de gran demanda en el mercado, tarda en desarrollarse, de seis a nueve meses (dependiendo de la temperatura del agua de cultivo) para cubrir la talla y tamaños requeridos para su comercialización  (300 gramos). Los ejemplares destinados a la reproducción alcanzan un peso de tres a cuatrokilogramos y llegan a medir entre 30 y 40 centímetros de largo.
Cabe señalar que los productores que requieran asesoría para la adopción de la tecnología desarrollada por el INAPESCA, pueden ingresar a la página www.inapesca.gob.mx  y consultar la información sobre este programa.
Actualmente la producción de trucha es de ocho mil 420 toneladas anuales que se comercializan en el mercado nacional.