HIPOTECAS

Fue el 15 de marzo de 1962 cuando el presidente de EEUU, John F. Kennedy, declaró ante el Congreso: “Todos nosotros somos consumidores”. En el marco del día internacional del consumidor  queremos expresar nuestra preocupación por los altos índices de probabilidad de volver a sufrir una crisis relacionada con uno de los productos financieros más importantes para los consumidores mexicanos, el crédito para la vivienda.

Con la experiencia vivida en nuestro país en los 90´s y el contexto actual de crisis internacional, nos preocupa de sobremanera que las condiciones en el ramo hipotecario se estén alineando para ocasionar un “crack” que eventualmente arrastre a la economía nacional.

Problemática de  la vivienda en México

Actualmente se están gestando un cumulo de problemas que pueden detonar en un estallido de cartera vencida como en los años 90,  pobreza,  desempleo, malas políticas públicas, el crecimiento demográfico, etc., si no se revierte la tendencia  todas las condiciones están dadas para que  gran parte de los ciudadanos estén incapacitados para cumplir sus obligaciones crediticias; El tema de la vivienda es de suma importancia ya que se aglomeran varios factores que hacen que el derecho a una vivienda digna sea una quimera  para un gran alto porcentaje de la población.
La vivienda en México atraviesa una crisis debido a la gran explosión de vivienda sin atender las necesidades sociales, miles y miles de casas son abandonadas  por distintos factores; el incumplimiento de pago debido al desempleo, la inseguridad que presentan algunos estados,  la falta de servicios y la lejanía de las urbes de algunos fraccionamientos. Algunos porcentajes son alarmantes:

Aumento de la pobreza

De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), de 2008 a 2010 el número de personas que viven en pobreza pasó de 48.8 a 52 millones de personas. Lo anterior implicó que en 1,003 de los 2,400 municipios que existen en la República Mexicana, 75% o más de su población vive en condición de pobreza.

La pobreza patrimonial creció  47.7% en el 2008  al 51.3 % en el 2010, lo que equivale a un 3.6%  traducido a 5 millones 413 mil 941 personas sufrieron pobreza de patrimonio,  debido a las elevadas tasas de interés que impidieron el pago de la deuda, perdiendo sus casas y autos. La pobreza de capacidad se elevó del 25.% en el 2008 al 26.7% en el 2010 traducido a 2 millones 261 mil 995 personas fueron afectadas en su capacidad de compra.

Porcentajes de casas abandonadas: Del parque habitacional  que suma 35 millones 617 mil 724  viviendas el 14.5 % están abandonadas lo que representa a  5 millones 162  mil casas.


Porcentajes de casas abandonadas por estados


Nuevo León, la Entidad de la región con el mayor número de viviendas desocupadas alcanzando un total de 230 mil 677; seguida muy cerca por Chihuahua, con 229 mil 210, siendo Ciudad Juárez la segunda ciudad fronteriza con mayor número de viviendas deshabitadas, alcanzando un total de 111,103; por su parte en Baja California con 214 mil 705 casas deshabitadas, se ubica Tijuana como la primera ciudad con tal problemática en la región con un total de 111,482 unidades; asimismo, Tamaulipas continua en la lista con 211 mil 746 viviendas en tal condición, seguida de Sonora con 140 mil 219 unidades, concluyendo con Coahuila que reporta 131 mil 42 casas sin habitar.
Dos zonas metropolitanas que también presentan un grave problema por abandono de casas son el valle de México y Guadalajara,
Datos del Programa de Ordenamiento de la zona metropolitana del Valle de México muestran que el total de viviendas es de 6 millones 510 mil 353, de las cuales 694 mil 175 están desocupadas. De este total, 211 mil 245 (30.4 por ciento) se ubican en delegaciones capitalinas y 78 mil 959 en municipios de Hidalgo, Sin embargo, es en el Estado de México donde se agudizó el problema, pues se contabilizaron 403 mil 971 viviendas abandonadas, principalmente en los municipios de Tecámac, Zumpango y Huehuetoca,  esto principalmente por la lejanía y la falta de servicios.
En la zona metropolitana del Valle de México habitan 21 millones de personas, de las cuales 53 por ciento vive en los 59 municipios conurbados del Estado de México, 42 por ciento en el Distrito Federal y cinco por ciento en los 21 municipios de Hidalgo.
Por lo que respecta a la zona metropolitana de Guadalajara, la situación no es mejor, ya que en el Censo de Población 2010, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló la existencia de 358 mil casas abandonadas en Jalisco, es decir, 15.4% del total de las vivienda, , principalmente en Tlajomulco de Zúñigae Ixtlahuacán de los Membrillos.
A estas cifras se suman a las declaraciones de la Subcomisión de vivienda abandonada de la Cámara de Diputados que reveló que en 2012 casi 5 millones de casas se encontraban deshabitadas en el país, de las cuales el 35% están en situación de abandono absoluto, cifra que cabe mencionar es aceptada por Alejandro Murat Hinojosa Director del INFONAVIT, en resumen es por este grave problema que aglomera una serie de factores que es necesaria una política integral, que no solo genere vivienda, sino que genere desarrollos inmobiliarios que sean sostenibles por los acreditados.
Crecimiento demográfico..
Actualmente la población en México asciende a un poco más de 100 millones de habitantes. Se estima que para el año 2015, 2025 y 2030 se alcance una población de 116, 126 y 130 millones de habitantes, respectivamente.
Referente a la vivienda, al déficit acumulado de viviendas en el país,  equivale a 8 millones 946 mil 725 hogares, de los cuales 3,827.852 son urbanos, 1,559.785 requieren mejoramiento físico y 2,268.667 vivienda completa a esto se deberá añadir la demanda que en el curso de los próximos años surgirá como resultado del arribo de generaciones todavía numerosas a la edad de contraer matrimonio y formar hogares independientes, ya que para  el año 2020, la población menor a los 15 años representará el 22.04%; la población entre los 15 y 34 años el 32.58%; mientras que la población entre los 35 y 64 años se incrementará significativamente al 37.15.
En virtud de las condiciones descritas, es indudable el ambiente de crisis que rodea al ramo hipotecario, en ese tenor es consideramos que tanto los consumidores de los créditos a la vivienda como las instituciones acreedoras, los órganos reguladores y el gobierno, deben adoptar políticas integrales, que por un lado hagan más accesibles los productos hipotecarios y por el otro mejoren las condiciones económicas de la población a fin de que quien no tiene casa, tenga el acceso a ella por vía del crédito, y quien la tiene pueda seguir cumpliendo con  las obligaciones hasta liquidar el crédito hipotecario.