- Linda Zavala
- Categoría: Opinión
REPERCUSIONES
Samuel Maldonado Bautista
Desde luego que no me refiero a la película protagonizada por Jorge Negrete y Pedro Infante, allá por los años de 1952, sino a los dos expresidentes de la República, de corte neoliberal, encabezados por el que es esposo de Margarita, nuestro paisano Felipe Calderón y el dicharachero vaquero guanajuatense, Vicente Fox Quezada.
Los presidentes de México, hasta antes de las autoridades mencionados líneas arriba, venían aplicando una política internacional verdaderamente respetable en todo el orbe; Se consideraban como de “lujo” y por o mismo, le daba mucho prestigio a nuestra República, tanto por la gran fraternidad de la misma, como por la solidaridad hacía toda la América Latina, sin exclusión alguna.
Era muy bien reconocida en casi todo el Orbe, pero principalmente se mantenía como un ejemplo a seguir por parte de algunas de las repúblicas sureñas de nuestro Continente, e incluso, se sentía el respeto de los poderosos Estados Unidos de Norteamérica, pero por desgracia, llegaron a desgobernarnos los neoliberales, que educados al estilo gringo, lo primero que hicieron fue arrodillarse ante los poderosos Espantados Unidos y casi tiraron por la borda, una excelente Política Internacional que era ejemplo en América Latina y más allá hasta del viejo mundo.
Recuérdese el asilo que dió a los republicanos españoles que sufrían la dictadura de Francisco Franco, por la gracia de Dios.
Desafortunadamente, uno de los que nos ha desgobernado recientemente y que ahora se encuentra en los umbrales de la puerta trasera del Palacio Nacional, es sin lugar a equivocarme, de los menos calificado y que sin pudor alguno, se dobló ante el locuaz mentiroso y poderoso vecino del Norte, lo que fue una pena nacional por actitud tan cobarde.
Ciertamente que no es el único presidente desacreditado que México haya tenido, pues hay otros “ex” que con las recientes declaraciones (muy insulsas críticas) dedicadas al Presidente Electo, me llevó a repasar los antecedentes y actitudes tanto de Felipe Calderón, como las del locuaz Vicente Fox.
Me he encontrado con varias grandes perlas de ambos expresidentes, (tal vez uno sea más que el otro, pero la regaron terriblemente, ya que de Felipe se recuerda su insulsa huelga de hambre y su auto exilio en el extranjero. Resalta de este expresidente su lloro público que reflejó su debilidad. Su “casaca militar usada” que le quedaba grande estará presente siempre, o hasta que su guerra iniciada contra el narcotráfico, que ha causado miles de muertos, termine. Ha quedado claro que en lugar de llevar la paz a las calles de todo el país, convirtió la lucha contra el narcotráfico en la esencia de su gobierno.
En el caso particular del vaquero ex presidente, inició el desprestigio de la Política Internacional que fama atenía en todo el orbe. Vicente, tontamente la degrado en forma terrible. Vaquero, más que `residente, groseramente le pidió a Fidel Castro Ruz, que “prácticamente terminando de comer”, saliera del salón a efecto de no encontrarse con el presidente de los Espantados Unidos, quien estaba a punto de llegar a la asamblea a realizarse. Esta tontería del vaquero guanajuatense, hizo perder gran parte del prestigio internacional que México se había ganado a pulso. internacionalmente.
Ahora, ambos ex (Calderón y Vicente), con un conocimiento muy pobre de lo que es la Política Internacional, coinciden en criticar la invitación que el Presidente Electo Andrés Manuel López Obrador, cursó a su colega (les guste o no) El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para que acompañe en la protesta que como Presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador, hará.
Totalmente fuera de lugar están los ex mencionados presidentes. Seguramente que están invitados a la protesta Presidencial y lo menos peor para ellos, es que se declaren enfermos y no asistan, pues de asistir, se llevarían una rechifla generalizada.
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