SINGULARIDADES.

-Regidores de Morena enfrentan viejas prácticas.

-La basificación de trabajadores es ahora motivo de reclamos 

Por Arturo Nieto y Morales

Hasta hace no muchos años atrás, existía la práctica, que se volvió costumbre, de gobernadores que al concluir su sexenio  otorgaban notarías a cercanos colaboradores como un reconocimiento a su esfuerzo y fidelidad. Era algo así como un bono de retiro que motivó las protestas de voceros de la sociedad y del Colegio de Notarios que exigieron que la titularidad de las notarías se sometiera a concurso.

Algo similar empezó a ocurrir en las administraciones municipales, como es el caso de Puebla, en las cuales el premio consistía en otorgar basificaciones  a trabajadores que llegaban como trabajadores de confianza cada trienio, pero habían sido parte del equipo de trabajo y del equipo de campaña política del presidente municipal saliente . 

El hecho es que regidores electos de la Coalición Juntos Haremos Historia que lidera Morena, ya pusieron el grito en el cielo para pedir que esta costumbre termine para que, antes del relevo institucional que habrá de llevarse a cabo el próximo 15 de octubre, se acuerde, entre gobierno municipal  saliente y el entrante, revisar el caso y permitir que el nuevo cabildo decida si las bases laborales se otorgan o no.

Se trata de 84 basificaciones, según dieron a conocer los regidores de Morena que se dicen respetuosos de los derechos laborales y quienes refieren la existencia de acuerdos tomados por los correspondientes equipos de transición, que de no cumplirse pondrían en duda la transparencia, honestidad y eficiencia del proceso de entrega recepción  en el ayuntamiento. De sobra está decir, que quienes se van llegaron a gobernar bajo las banderas del PAN y quienes llegan, con las siglas de Morena.

Se apruebe o no la basíficación, los 17 regidores electos de Morena ponen el dedo en la llaga porque para ellos, esta forma de gobernar tiene un fuerte olor a corrupción y también para ellos, se contradicen las bondades contenidas en la cuarta transformación propuesta por el Presidente Electo Andrés Manuel López Obrador.

A semejanza con lo que ocurre en el Congreso del Estado en donde ya se hizo efectivo el relevo de diputados locales con una mayoría de legisladores de Morena- y en donde se avala la revisión de los procedimientos que dieron paso a la aprobación de las cuentas públicas de presidentes municipales salientes, porque existen dudas en algunos casos sobre el manejo de los recursos públicos, las repercusiones ahora se registran en el ayuntamiento poblano  aunque ahora se trata de aspectos laborales.

Las repercusiones sin embargo van más allá del simple hecho de acomodar a la gente que llega, ya que las contrataciones estarán normadas a partir de un presupuesto y al respeto que debe haber de la plantilla de trabajadores de base, muchos de ellos sindicalizados, que pedirán que sus representantes los defiendan en caso de despido ante la entrada en funciones del nuevo gobierno. Este último, procurará a partir de sus principios, no engordar sino disminuir la burocracia teniendo como norma la austeridad así que todavía falta que en este nivel de gobierno se anuncien los cambios en la administración, quizá con la fusión o de plano desaparición de algunas dependencias que duplican funciones.

Habrá que esperar a ver que dice la Presidenta Municipal Electa, Claudia Rivera Vivanco.