RESURGIR

El mundo no se terminó y   el  dos mil doce ya se acabó,  para RESURGIR iniciando el año y un   nuevo capítulo   que empieza en cada momento a partir de ti y  todo lo que es para ti,  donde te sientas más tú.
Hay personas que han pasado por momentos desagradables  y  estas  fechas les son difíciles para convivir como si nada hubiera sucedido  viviendo solo por vivir,  y  que  sumergidos  en sus problemas no hallan  la forma de salir de ellos y se  hunden  cada día más.

Atrévete a cruzar el firmamento al igual que lo hacen las águilas después de cambiar su plumaje, su pico y sus garras;    logrando  RESURGIR para volver a volar donde sólo ellas se atreven  a  volar, después de sentirse acabadas.

RESURGIR es hacerte  de nuevo.  Es volver a aparecer en otro  escenario  con nuevos espectadores.  Es no darte por vencido y con valentía  llenarte  de nuevos bríos,  aún cuando  hayas caído.
Regálate un voto de confianza  tan amplio como tus pensamientos,   tan largo como tus deseos y tan profundo como el coraje  para empezar otra vez.
Otra vez es una vez más,  es  iniciarte como  aprendiz y  batallar cada día con las cosas que no sabías.  Es repasar  la lección comprendiendo su contenido,  y asimilar cada letra  de las miles de palabras que muchas veces escuchaste,   y  quizá no las captaste.
Estudia a profundidad que te dice cada renglón  que fue escrito para ti,  con la intención de hacerte más conocedor de lo que existe a tu alrededor. Ese alrededor que vive en cada persona  que  nunca se asoma para ver cuánta riqueza  espiritual posee,  y vive  pobrezas
internas. 
RESURGIR  es salir de la monotonía.  Es retomar tus sueños.  Es  explorar  nuevos  caminos.  Es  aproximarse a la cima.  Es  tomarte de la mano y dirigirte  contigo para volverte tu mejor amigo,  tu consejero y tu cómplice de cada nueva aventura de las que está hecha la vida.
RESURGIR es decir adiós a los miedos que  paralizan  el ímpetu que  se lleva  dentro,   impidiendo ver que hay afuera,   donde los audaces  disfrutan  su valentía  sin temor y  desconfianza.
RESURGIR es  comprender   y creer en ti  inspirándote  confianza.   Es tomar  la decisión  de saber cuánto vale tu condición humana y lo que puedes hacer con ella.  Cómo eres y lo que eres capaz de hacer;  no por cuánto tienes, sino por cuánto vales.  
Quien no se decide al cambio no se concede crecer.  Todo individuo puede  florecer cuando no  se niega nunca  la oportunidad de averiguar qué hay detrás  de la parte de enfrente, donde pasa otra corriente más clara y más ligera.
Si no te arriesgas nunca sabrás donde están tus límites.  Déjate ver a ti mismo aún cuando alguien te haya ocultado. Deja que los demás sean  opacos, mientras tú has  decidido irradiar luz.
Sé luciérnaga de día y de noche, nunca te canses de brillar.   Acéptate como eres, no como los demás quieren que seas.  Compréndete sin cuestionarte,  no cuestiones lo que no comprendes.  Se feliz con lo que tienes, y esfuérzate por ser más feliz.   Vale la pena luchar, por
lo que vale la pena tener.   Ama lo que haces,  que  con amor se logra lo mejor.
Quien comprende también ama.
Quien no conoce nada, no ama nada.
Quien no puede hacer nada, no comprende nada.
Quien nada comprende, nada vale.
Pero, quien comprende también ama, observa, ve…
Cuanto mayor es el conocimiento inherente a una cosa, más grande es el amor.
(Pacelso)
“Haz tiempo para todo, y lo que es tuyo vendrá a tus manos en el momento oportuno”.
(Mahatma Gandhi)
El Mundo Requiere… Resurgir
Desde tu desánimo,  hasta recobrar tu energía.
Desde tus intenciones, hasta ver los  resultados.
Desde tu ego,  hasta  tu  humildad y  generosidad.
Desde tu pequeñez de visión, hasta  la  bóveda celeste.
Desde tu frustración, hasta  haber logrado una ilusión.
Desde tu lejanía con Dios, hasta  sentirlo de cerca.
Desde tu petición con fervor,  hasta verla hecha realidad.
Dios escucha hasta la oración más silenciosa, si viene de un corazón sincero.
La esperanza es desear que algo suceda, la fe es creer que va a suceder, y la valentía es hacer que suceda…